Los seguidores de Omar Montes han agotado la paciencia de Jorge Javier Vázquez, y el presentador ha aprovechado este miércoles en 'Sálvame' para mandarles una demoledora advertencia y un par de 'recaditos'. Los juegos infantiles, las peleas virtuales y las actitudes inmaduras con las que se sienten amparados para desacreditas sin justificación no van con él, y se lo ha querido dejar muy claro. Los acólitos del exnovio de Isa Pantoja se han posicionado junto a él como un auténtico ejército con un enemigo a batir: el propio Jorge. Y es que les ha sentado muy mal que 'acorrale' al cantante en cada una de sus apariciones en plató. Asimismo, se ha malinterpretado en su entorno la expresión "talibán de la moral" que le dedicó a Montes.
¿No será que Omar cuenta con menos recursos para medirse a Vázquez? Jorge, de esta manera, así lo entiende: "Yo es que le saco 20 años me hace reflexionar y me pongo a pensar cómo lo viviría yo si fuera Omar Montes, y esto solo lo da la edad. Cuando una persona se ve cuestionada, se revuelve como puede, y yo en estas movidas ya no puedo entrar, porque por edad ya no estoy en ellas".
Nuestro querido bloguero ha revelado que no ha parado de recibir mensajes privados por Instagram –"como unos cincuenta", comenta–, con el objetivo de "hacerle daño", aunque ha demostrado que, en cuanto a esta intención y con él, pinchan en hueso. El contenido de estos mensajes, curiosamente, es muy concreto: una foto en la que aparece "de fiesta en un 'after', en muy mala postura". Con mucha ironía, Jorge Javier se ha dirigido a toda esta "gente muy enfadada, fans de Omar" de los que ha acabado un poco harto. "Me duelen dos cosas. Por un lado, ponen: "Y esta es la persona que dice a Omar que vaya al psicólogo"... Y ponen vaya con 'LL", arrancaba punzante. Y continuaba: "Sabéis que utilizo Instagram para ligar y esta es una foto que ocupa espacio. Ya la he visto y estoy fatal en ella, pero no me la enviéis más. Entorpecéis mi labor de elegir los perfiles que más me gustan". ¡ZASCA!
En el mismo tono jocoso, ha expresado que también le ha quedado claro que va a tener que "renovarla" y que le toca salir de nuevo de fiesta salvaje. Definitivamente, parece que no le queda otra a Jorge...
Durante su agudo discurso ha abandonado el tono ligero en dos ocasiones. Primero para quitarle hierro a las sensibilidades que ha herido al "mandar a Omar al psicólogo". "Que no le he enviado a la cámara de gas, y son profesionales que hacen una gran labor por ayudar a quienes acuden a ellos. Yo acudo al psicólogo cada cierto tiempo, porque es muy saludable", ha matizado. Finalmente, ha aprovechado para hacer toda una declaración de intenciones: "No quiero vivir con miedo. Voy a seguir expresando lo que siento y viviendo la vida como quiero y no como consideren los demás".