Hablamos en exclusiva con La Húngara: "Me han ofrecido muchas veces ir a 'Supervivientes' y no descarto que algún día me veáis tirarme del helicóptero"

La Húngara se sincera en exclusiva con Lecturas sobre su vida dentro y fuera de los escenarios como mujer, madre, abuela y la artista que sigue enamorando al público

La Húngara

Con más de dos décadas sobre los escenarios, Sonia Priego, conocida por todos como La Húngara (45 años), ha sabido ganarse el corazón del público con su arte, su estilo inconfundible, su energía arrolladora y una música que conecta con el alma. Considerada una figura imprescindible del flamenco-pop y la rumba moderna de nuestro país, esta arrebatadora mujer de mirada profunda sigue cosechando éxitos allá donde va. Hoy nos abre las puertas de su mundo para hablar de su música, su historia y sus sueños.

Por segundo año consecutivo, la artista sevillana interpreta su propia versión del famoso jingle de Ponche Caballero. Y es que es imposible no vibrar al ritmo de "Caballero, Caballero, Caballero… Ponche Caballero". En Lecturas tuvimos la oportunidad de charlar con ella en exclusiva en el icónico bar Candela ubicado en el barrio de Lavapiés (Madrid), un espacio cargado de historia flamenca que ha vuelto a abrir sus puertas para disfrutar de buena música y buena comida.

La Húngara

Cada verano, las sobremesas se convierten en el momento más especial. Ahora, lo hacemos acompañados de Ponche Caballero y tu música. ¿Por qué te gustaría brindar?
Por muchas sobremesas más rodeada de la gente que quiero y que me quiere. Y poder hacerlo brindado con Ponche Caballero, una imagen que me ha acompañado desde chiquitita, nunca faltaba en el mueble bar de la casa de mis padres. 

Desde tus comienzos hasta ahora, ¿cómo sientes que ha evolucionado tu estilo musical y tu forma de expresarte en el escenario? 
Yo pienso que mi forma de expresarme sigue siendo igual que el primer día que me subí a un escenario y mi música procuro que siempre suene a La Húngara, esa Húngara que le gusta y ha enamorado a tanta gente. 

¿Tienes alguna superstición o manía antes de subirte al escenario?
La verdad es que soy MUY supersticiosa, a veces incluso un poco maniática. Una de mis manías es ponerme siempre el mismo perfume antes de salir, el que llevo usando desde hace años.  

Si tuvieras que elegir una de tus canciones, ¿cuál sería y por qué?
Todas mis canciones son super especiales para mí, pero si tuviese que quedarme solamente con una y creo que es la que más les “debo” a mis fans es Me duele el corazón

Si no te hubieras dedicado a la música, ¿qué te habría gustado hacer?
Me dedicaría a dar clases de baile. Lo hice en su momento, y me encantaría seguir haciéndolo, enseñar a bailar es una de mis pasiones

La Húngara

Has colaborado con artistas muy conocidos, como C. Tangana o Camela. ¿Cuál ha sido la colaboración que más te ha marcado y por qué?
No podría quedarme solo con una, todas mis colaboraciones son especiales para mi porque son con artistas a los que admiro y quiero mucho. Pero es verdad, que la de C.Tangana supuso un antes y un después, Tú me dejaste de querer es una canción a la que le tengo un cariño inmenso, me ha hecho vivir momentos que no olvidaré nunca. 

¿Hay algún artista con el que sueñes trabajar y aún no se haya dado la oportunidad?Sobre hacer alguna colaboración con alguien que sueñe… te diría con el gran Alejandro Sanz o con mi querida Isabel Pantoja, la admiro mucho. 

Eres madre, abuela y artista a tiempo completo. ¿Cómo logras equilibrar la vida en casa con los escenarios y giras?
Siendo todo a la vez jajajaja. Mamá, abuela, hija, tía, hermana… y también artista, porque todas ellas es lo que soy. Cuando subo a un escenario me convierto en La Húngara, pero nada cambia, porque mi público es mi familia también. 

Tu hija Laura decidió seguir tus pasos. En una industria tan dura y exigente, ¿qué consejo le das?
Que mantenga los pies en la tierra, que no se olvide nunca de quien es y de donde viene. 

¿Qué supuso para ti ser madre tan joven?
Pues imagínate… era una niña cuando todo paso: una niña cuidando a otra niña. Eso me obligó a madurar y me enseñó a luchar para que a mi hija no le faltará de nada.

¿Qué valores has intentado transmitirles a tus hijas?
Transmitiéndoles siempre uno de los valores más importantes para mi en esta vida: ser buena persona. 

¿Cómo es un día normal en la vida de Sonia?
¡Con mucho movimiento! Soy una persona sencilla, que me gusta disfrutar estando con los míos, pasando un buen rato tranquilo en casa y teniendo una rutina como una persona normal, pero es cierto que ahora mismo estoy trabajando mucho, la época de verano con conciertos, festivales… es un no parar. ¡Y me encanta! Me encanta que cada día sea una nueva aventura. 

La Húngara

¿Qué hay en tu bolso que siempre llevas contigo?
Un colorete, un brillo de labios y un perfume pequeño. Y por supuesto, las fotos de mi Manuel y de mi León (sus nietos).

Cantas mucho al desamor, ¿Qué significa el amor para ti? ¿Has tenido malas experiencias?
El amor es el motor que mueve el mundo y yo soy una persona que se entrega mil por mil y eso a veces duele, terminar relaciones en las que fuimos felices a todos nos duele.  

¿Te han propuesto participar en Supervivientes? Y si no lo han hecho, ¿irías?
¡Sí, me lo han propuesto muchas veces! Y no descarto que un día me veáis tirarme del helicóptero. 

Una de tus canciones más aclamadas es ’Tengo que impedir esa boda’: ¿Has impedido alguna o te hubiera gustado impedirla?
Sí, esa canción ahora es una de las más esperadas en mis conciertos. No he impedido ninguna, pero si tuviera que hacerlo lo haría, además cantando esa canción jajajaja 

Si pudieras hablar 10 minutos con la Húngara de hace 20 años, ¿qué le dirías?
Que fue muy valiente. Que no se imagina la de cosas bonitas que le quedan por vivir, la abrazaría y le diría que no se preocupe, que todo va a ir bien. Y sobre todo que siga luchando por sus sueños, que los sueños se cumplen.