GH DÚO: Kiko Rivera, "muy agobiado", recurre a Isa Pantoja para salvarse de la expulsión

La nominación para salir esta semana ha caído sobre Kiko Rivera como un mazazo. El hijo de Isabel Pantoja ha empezado a replantearse todo el concurso, lo que supondría salir, pero también quedarse. No solo reconoce estar "superagobiado", sino que toda esta situación le ha producido un arranque de nostalgia que, para sorpresa de todos, le ha llevado a acordarse de su hermana, Isa Pantoja.

Si a principios del concurso obviaba a su hermana en su blog, ahora hasta la ha mencionado, con un tono decididamente conciliador. Aquel detalle dolió extremadamente a Chabelita y ponía de manifiesto la compleja relación que mantienen. 

“Me encantaría que apareciera mi hermana o mis hermanos o mi prima. (...) De mi hermana, que fíjate tú, la veo de higos a brevas, me acuerdo muchísimo. Pienso en cómo estará con sus cosas, si habrá tenido más líos… Al final me preocupo porque la quiero mucho”, reflexionaba en voz alta. ¿Se trata de una estrategia o de sentimientos auténticos?

Kiko también ha mostrado preocupación por su madre. “Me pregunto cómo estará mi madre", declaraba. "A mi prima, que la veo relativamente poco, la echo mucho en falta. Aquí te das cuenta de lo que quieres a la gente… Yo sé a quién quiero, pero me doy cuenta de a quién necesito”, continuaba.

Otro de los asuntos que también tienen preocupado al hijo de la tonadillera es el hecho de que, si él fuera expulsado, es consciente de que su mujer lo pasaría muy mal dentro de la casa. "Porque si tú te vas, yo me muero", confesaba también.

Irene ha intentado animarle y hacerle ver que siempre van a estar mejor que los duros momentos económicos que han dejado atrás: “A lo mejor es que estás nominado y te entra más ansiedad. Lo peor ya lo hemos pasado. Más nos hemos agobiado estos tres meses atrás estando en casa. Eso tienes que pensarlo”.

Al matrimonio se les está haciendo un mundo estas semanas de encierro en Guadalix en las que, sobre todo, están echando de menos a sus hijas. “Tengo muchas ganas de ver a mis niñas. Ahora mismo por escuchar sus voces daría la vida. Fíjate que tan solo son siete semanas, pero la gente no sabe lo que es pasar ese tiempo aquí”, le comentaba en un momento de intimidad.