David DeMaría está dispuesto a evitar las polémicas y a dar carpetazo a un episodio de su vida que ya considera cerrado. Y lo hace por el auténtico motor de su vida: su hijo Leo, de dos años y medio. El cantante, que se encuentra participando en la competición Land Rover Discovery Challenge, ha hablado de su nueva situación personal y sentimental desde que su mujer Lola Escobedo y él hayan decidido poner fin a su matrimonio, una unión que ha durado cuatro años.
El artista gaditano se ha mostrado sereno y con el objetivo de concentrarse en las cosas cosas buenas que le rodean, y son muchas. Aunque se ha detenido en señalar una por encima de todas. Estoico afirmaba encontrarse "afrontado" esta nueva vida. "Estoy muy contento con mi gira, con mi carrera y con mi hijo, que es lo que me da más fuerza del mundo", ha afirmado. Todos estos ingredientes están ayudando a DeMaría a mantener una actitud positiva.
Por el amor hacia el pequeño Leo, la ya expareja tomaba la determinación de vivir el fin de su relación con la máxima discreción posible. La tristeza y las decepciones pesan en este tipo de situaciones dolorosas, pero mucho menos que poner todos los medios de su parte porque lo malo no se acabe desbordando y afecte a su hijo. Por eso, el intérprete de 'Barcos de papel' ha admitido que su hijo "está feliz". Sus últimas declaraciones han sido: "Mi hijo se va a criar con mucha normalidad". De las que se intuye que su intención y la de Lola es la de llegar a un acuerdo que haga lo menos traumática posible la separación.
![Lola Escobedo, David DeMaría y su hijo Leo](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 630 401"%3E%3C/svg%3E)