Una experta en protocolo advierte del debut de la infanta Sofía con tiara: “Será mucho más que un acto estético. Indicaría que su papel ya no es únicamente familiar"

Una de las asignaturas pendientes de la princesa Leonor (19 años) es la de lucir tiara. La princesa de Asturias, tanto por su pertenencia a la familia real como por su condición de heredera, tiene acceso a las joyas más exclusivas de un joyero histórico. Sin embargo, por ahora no ha llegado ese momento en el que lucir tiara. Pese a que hace ya más de un año que cumplió la mayoría de edad, un momento en el que se empezó a hablar de cuándo lucirá este accesorio por primera vez, se está haciendo de rogar. Algo que también está sucediendo con su hermana la infanta Sofía (18 años).

Aunque al pensar en el debut con tiara la primera que se viene a la cabeza es la princesa Leonor, también está en el aire cuándo llevará la infanta Sofía su primera tiara. Porque ella, pese a no ser la futura Reina, también puede lucirla en alguna ocasión. De esto hemos hablado con María José Gómez Verdú, experta en protocolo y etiqueta. Ella nos ha explicado cuáles son las condiciones en las que la hija pequeña de los reyes Felipe y Letizia puede lucir tiara, a cuáles de las que tiene la familia puede acceder, qué significado tendría que llevase un accesorio como este…

Una experta en protocolo sobre el uso que la infanta Sofía dará a las tiaras

Lo primero que nos ha explicado Gómez Verdú ha sido que "las tiaras no son simplemente joyas. Son símbolos, insignias visuales de estatus dinástico, herramientas de comunicación no verbal en el complejo lenguaje del ceremonial monárquico”. Por tanto, la experta ha querido empezar su análisis poniendo por delante que el uso de una tiara es mucho más que lucirla a nivel estético y ya. Es un accesorio que dice muchísimo y que supone toda una declaración de intenciones. De ahí que haya que pensar muy bien cuándo lucirla, más si cabe si se trata de la primera vez.

Eso sí, en el caso de la infanta Sofía su uso será diferente al que haga la princesa Leonor. María José Gomez Verdú nos ha explicado que esto se debe a que “en Europa, el uso de la tiara está rigurosamente reglado por el protocolo y, aunque estas normas no estén escritas en piedra, siguen códigos no explícitos que distinguen, por ejemplo, entre una reina consorte, una heredera y una infanta”.

Entonces, ha pasado a profundizar en el uso que la infanta Sofía puede hacer de las tiaras y en el significado que esto tendrá. Gómez Verdú nos ha dicho que “la infanta Sofía, como hija menor de los Reyes, no está llamada a ocupar el trono, pero sí representa, y representará cada vez más, a la institución. Es aquí donde la tiara cobra significado: no como simple adorno, sino como un gesto de pertenencia institucional, un acto de afirmación simbólica de su rol dentro de la Casa Real”. Por tanto, el día que luzca tiara, estará afianzando el papel que ocupa dentro de la Corona y su compromiso con la misma. ¿Cuándo lo hará? Se desconoce, porque “su uso no es automático. Que haya alcanzado los 18 años la hace elegible, pero no necesariamente destinataria”.

Pero podría dar el paso cuando desde Casa Real así lo consideren, sin tener que esperar a estar casada como sucedía antaño. La experta nos ha recordado que “en la tradición española, al igual que en otras casas reales, las tiaras han sido reservadas históricamente para mujeres casadas”. Pero esto es algo que desde hace tiempo empezó a cambiar. Este protocolo se volvió más flexible y ya no hay que esperar a que una mujer de la realeza contraiga matrimonio para que se ponga este accesorio. “Esta norma ha ido relajándose desde finales del siglo XX, cuando las princesas solteras comenzaron a lucir tiaras en actos de gala, siempre bajo criterios de edad, relevancia institucional y ocasión”, nos ha explicado la experta. 

En este sentido, se ha remontado a que “la reina Letizia, por ejemplo, no las lució hasta su boda. En cambio, en otras casas, como la sueca o la danesa, las jóvenes princesas pueden usar tiaras desde los 18 en cenas de Estado o recepciones diplomáticas, siempre según el protocolo nacional”. Un precedente que lleva a que la princesa Leonor o la infanta Sofía puedan dar la sorpresa en cualquier momento. 

Sobre el acto elegido por la infanta Sofía para lucir su primera tiara, la autora del libro ‘Protocolo POP’ ha hecho alusión a que, según el protocolo, “técnicamente, podría llevar tiara en cualquier evento de gala de alta representatividad, como una cena de Estado en el extranjero, una visita oficial de jefes de Estado, o incluso una boda real”.

La diferencia entre Leonor y Sofía en lo que se refiere a las tiaras

Sea cuando sea cuando la luzca, lo que sí se sabe es que lo hará con una gran diferencia con respecto a su hermana la princesa Leonor. El motivo, que hay tiaras a las que la infanta Sofía no puede acceder mientras que su hermana y su madre sí. Gómez Verdú ha hecho alusión a que “su acceso no será al joyero real reservado para las reinas y futuras reinas. No puede, por tanto, usar las joyas de pasar, ese conjunto de piezas excepcionales, como la tiara Flor de Lis o el collar de chatones, que la reina Victoria Eugenia dejó explícitamente como patrimonio dinástico para uso exclusivo de la consorte y la heredera al trono”.

En este sentido, “la infanta Sofía tendrá que recurrir, en cambio, a las joyas personales de su madre o de su abuela, la reina Sofía”. Esto conlleva que entre las tiaras que podría lucir en un futuro, están “las tiaras como la Prusiana o la Mellerio, utilizadas por las reinas en contextos menos solemnes, podrían ser las candidatas naturales para su debut”.

Lo que sí podría es recibir un regalo tan exclusivo como una tiara. Según la experta en protocolo y etiqueta, la hija pequeña de los reyes Felipe y Letizia “también podría, en el futuro, recibir una tiara propia, bien como regalo institucional, bien como herencia, como ha sucedido en otras familias reales europeas con las segundas hijas o miembros menores de la dinastía”.

El mensaje que lanzará la infanta Sofía

Sobre lo que ha vuelto a hacer hincapié María José, ha sido sobre el mensaje que la infanta Sofía lanzará la primera vez que lleve tiara. “Pero lo interesante no es tanto el cuándo, sino el por qué", ha determinado la experta. En este sentido, ha explicado que “que la infanta Sofía luzca tiara será mucho más que un acto estético: será un acto de afirmación institucional. Y será, también, un acto de comunicación. Indicaría que su papel ya no es únicamente familiar, sino representativo; que no solo acompaña, sino que representa. Y eso, en una monarquía parlamentaria como la española, donde cada gesto tiene valor constitucional simbólico, resulta relevante”.

De ahí que la experta en protocolo y etiqueta haya advertido de que “su primera aparición con tiara no debería ser precipitada, sino estratégica”. Para María José Gómez Verdú, “debería ocurrir en un contexto que legitime y justifique su uso: una ocasión que no solo lo permita por protocolo, sino que lo requiera por carga simbólica”. 

Sobre decisiones como esta que desde Zarzuela tienen que tomar sobre la infanta Sofía, Gómez Verdú ha destacado que “es evidente que la Casa Real está gestionando con cuidado creciente la figura de la infanta Sofía. A diferencia de su hermana, que tiene asignado desde su nacimiento el peso institucional de la sucesión, Sofía ha crecido en un espacio más discreto, más íntimo”. 

A esto, la experta ha sumado que “su educación internacional, su soltura natural y su progresiva exposición pública apuntan a una voluntad clara de integrarla en una estructura representativa más visible. Su futuro no está escrito, pero todo parece indicar que será algo más que 'la segunda hija del Rey'”. Algo que ella misma podría comunicar cuando haga su esperado debut con tiara.