La Casa Real noruega no está pasando por su mejor momento desde hace aproximadamente un año. Marius Borg, el hijo de la princesa Mette-Marit (51 años) antes de casarse con el príncipe Haakon (51 años), provocaba un escándalo del que se hablaba en medio mundo. Tras su detención y posterior puesta en libertad, finalmente el nórdico ha sido imputado de 23 delitos. Mientras tanto, sus dos hermanos han querido unir sus fuerzas para tratar de dar un soplo de aire fresco a la Corona noruega.
Desde el primer momento la Casa Real noruega se ha desvinculado de todos estos movimientos relacionados con el hijo de la heredera. Verdaderamente Marius no pertenece a la familia real pero el hecho de haber residido en el palacio y que incluso algunos de los hechos de los que presuntamente se le acusan ocurrieron allí, provocaba el enfado de los noruegos que exigían explicaciones. Sin embargo, los príncipes herederos han intentado continuar con su normalidad en los distintos actos a los que han acudido.
Su estrategia
Desde que el pasado verano ocurrieran estos hechos, la Casa Real ha tratado de mantenerse al margen en todo momento. Sin embargo, las preguntas al respecto en todo este tiempo han sido inevitables. De hecho, se pudo ver incluso al príncipe Haakon acompañando al hijo de su esposa para que ingresase en un centro de desintoxicación en Reino Unido, ya que había alegado que algunas de estas cuestiones de las que se le acusaban venían propiciadas por estar bajo sustancias.
Sea como fuere, sus comentarios a todo lo relativo a Borg han sido escasos, tanto por parte de Mette-Marit como por parte de su marido. De hecho, la Corona noruega mantenía la esperanza de no verse salpicada por este tipo de cuestiones, aunque ha sido prácticamente inevitable. La princesa Ingrid Alexandra ha seguido los pasos de la princesa Leonor en lo que se refiere a su formación militar. O, más bien al revés, ya que la nórdica es mayor que la Princesa de Asturias.
Sus padres acudían a diferentes eventos militares para reforzar la buena imagen de la Corona que querían ofrecer, ya que el futuro de la misma estaba totalmente garantizada con ella. Pero ahora acaba de hacerse oficial la imputación de los 23 delitos a Borg, aunque la policía del país tendrá que tomar la decisión correspondiente para realizar una acusación formal. Llama la atención la estrategia que han tomado desde el país nórdico para hacer frente a ello.
Inevitablemente es algo muy comentado en Noruega, además de parte del extranjero por tratarse del hijo de quien es. De hecho, la población de su país ya se ha mostrado indignada en anteriores ocasiones con las diferentes novedades que han ido apareciendo. Por ello, los hijos de los herederos han querido unir sus fuerzas y durante los últimos días han compartido diferentes momentos juntos a través de sus redes sociales.
GTRES
Ya en su momento intentaron jugar al despiste con este tipo de situaciones para así evitar que se hable de la situación de Marius Borg. Pero en el último vídeo en que Ingrid Alexandra y Sverre Magnus aparecen apoyando a la selección nacional femenina de fútbol han continuado por esta misma línea. Además de apoyar a las jugadoras de su país, también forma parte de esta estrategia para desviar la atención y conseguir que se hable de cualquier aspecto menos de la imputación del hijo de la heredera.
La unión familiar
A pesar de todo este tipo de comentarios y de las distintas maniobras para tratar de no perjudicar a la Corona noruega, también se pueden obtener algunos detalles positivos de este último vídeo de los hijos de Haakon. Los comentarios en las redes sociales hablan de todo tipo de cuestiones, como las relacionadas con su hermano. Pero también destacan algunos mensajes positivos que la prensa alemana ha querido destacar.
Desde ‘Bunte’ han analizado todos estos detalles y la opinión de la gente que ha querido dejar algún mensaje en dicho vídeo. Lo más destacable de todo es el hecho de que tanto Ingrid como Sverre mantienen los pies en la tierra, a pesar de ser hijos de los futuros reyes del país. “Sus looks también muestran que la princesa Ingrid Alexandra y el príncipe Sverre Magnus se han mantenido maravillosamente normales y con los pies en la tierra”, dicen desde el medio alemán.
En cualquier caso, destacan las vestimentas informales que han usado para este apoyo deportivo. Además, Ingrid Alexandra ha decidido prescindir también del maquillaje, lo que aumenta su naturalidad y espontaneidad. En cualquier caso, este escenario no era el lugar apropiado para que los hijos de Mette-Marit se pronunciasen sobre las cuestiones de su hermanastro.