Érase una vez, una modelo que se hartó de posar. Se cansó de poner las mismas caras. De repetir miradas y de calcar posturas. Se llamaba Cara Delevingne y fue uno de los iconos de la moda más fugaces. La inglesa se baja de las pasarelas decepcionada de una industria que la ha convertido en un ídolo para cientos de adolescentes (y algunos no tan jóvenes). Delevingne se quiere centrar en su nueva carrera como actriz y dejar las editoriales y pasarelas a un lado.

Como el que ve una estrella fugaz, así ha sido la carrera de la hermana de Poppy en una industria que suele dejar antes de ser dejada. Pero con Cara las cosas siempre son a su modo, y ha sido ella la que, en plena cresta de la ola, ha mandado a ‘pegar la vuelta’ a la moda. Ha tardado mucho, no creáis. Tan inquieta como es ella, Delevingne necesita constantes desafíos y este mundo, que reverencia cada cosa que hace o dice, no se los ofrecía. Le atraía de manera singular la actuación, ya que le ofrecía la oportunidad de jugar, de cambiar mil veces de personaje y de representar diferentes registros. ¿Pero el cine le dará tanta manga ancha? ¿Le reirá las gracias del mismo modo que lo hacían las pasarelas? Con una película en cartelera, ‘Ciudades de papel’, y con otras pendientes de estreno entre las que destacan ‘Pan’, con Hugh Jackman, o ‘Suicide Squad’, con Jared Leto y Ben Affleck, todavía está por demostrar si la crítica también está rendida a sus encantos o todavía la mira con cierto recelo.

“La moda me ha hecho odiar mi cuerpo”, comentaba hace unos días esta actriz en ciernes a The Times, asegurando que su trabajo como modelo le ha llegado a provocar tal estrés que hasta le hizo padecer psoriasis, y vivió como muchos maquilladores, a la hora de trabajar con su piel descamada, usaban guantes “porque pensaban que era una leprosa”. En la misma entrevista ofrecida al Times esta rubia con parte de sangre real aseguró haberse sentido “vacía” al desfilar y que esta carrera no le permitía desarrollarse como ser humano.

Ahora ya, retirada a los 23 años, mira con ilusión los nuevos retos que su verdadera pasión le ofrece. ¿Veremos Hollywood a sus pies?