El uso de numerosas aplicaciones de aprendizaje automático es cada vez mayor. Su éxito reside en la rapidez para acceder a respuestas y, por consiguiente, que agiliza muchos procesos para los que antes había que dedicar mucho más tiempo. Asusta, eso sí, porque tiene sus luces y sombras.
Los avances tecnológicos hacen que cada vez se aprieten más tuercas a la hora de ajustar todas esas herramientas de asistencia. Es nuestra responsabilidad, advierten los expertos, cotejar la información que nos ofrece y no abandonar por completo una revisión final.
Silvia Leal, experta en Inteligencia Artificial, participaba junto al especialista en Seguridad Digital Gonzalo Asensio en el podcast 'Mental Breaks' y debatían sobre los pros y contras de un escenario en el que estamos situados desde hace tiempo, pero que cada vez se hace más presente en el día a día de personas y empresas.
Los dos invitados contestaban a las preguntas de los anfitriones desde la pasión y la vocación, pero también siendo críticos con los aspectos que todavía hay que pulir para aprovechar al máximo todo lo que ofrece este campo tecnológico del que ya resulta difícil huir. Plantea miedos, pero también numerosas oportunidades, porque aunque haya trabajos que puedan desaparecer, hay otros muchos que se generen a través de este importante desarrollo.
La generación de la Inteligencia Artificial
El debate está servido desde hace tiempo en la calle y en los medios de comunicación. Silvia Leal es consciente de la polémica que suscita defender la materia en la que se ha especializado y que le ha llevado a asesorar a la OCDE y a la Comisión Europea en Bruselas, pero le ha servido para aportar algunas píldoras en 'Mental Break Podcast'.
"Quiero utilizar las palabras justas, para que luego no me critiquen", comenzaba bromeando antes de entrar en el jardín: "Dicen que es la primera vez que nos encontramos con una generación que es más tonta que la anterior. Siempre hemos ido desarrollando la inteligencia y cada vez, gracias a una mejor sanidad o educación, se ha visto que somos más listos".
Ahora, continuaba la experta en Inteligencia Artificial, "se ha hecho una medición en Estados Unidos que la generación que se ha medido ahora es más tonta que las anteriores y la culpa de todo se le echa a la tecnología, entonces hay que tener cuidado". No considera que por no memorizar los números de teléfono de la agenda o usar la calculadora para ciertas operaciones se pueda hacer una afirmación así.
Los supervivientes del cerebro
Con la Inteligencia Artificial hay un cambio en el cerebro y trabajamos de otra forma. Eso no quiere decir, coinciden los expertos, que vaya a disminuir la importancia de la mente humana, porque hay cosas que no se pueden sustituir, tal y como explica Gonzalo Asensio: "La humanidad, la sensibilidad, la emoción y los valores".
"Para lo que sirve la IA es para lo más importante para el ser humano, que es tiempo. El tiempo es lo más preciado, porque tú a cualquier persona con dinero o con un alto cargo le preguntas lo que más valora y normalmente es el tiempo. Eso nos puede ayudar a desarrollarnos en otras habilidades", reflexionaba Rafa Rodrigo, periodista y presentador del citado podcast.
Un futuro prometedor con vigilancia
"La Inteligencia Artificial te va a permitir hacer de todo", promete Silvia Leal, aunque advierte que, tal y como ocurre con los seres humanos, al estar hecha "a nuestra imagen y semejanza", tampoco es perfecta. "Lo que vamos a estar haciendo es controlarla y vigilarla, porque se equivoca", añade.
La experta ha diferenciado entre la Inteligencia Artificial analítica, que es la que nos puede dar resultados según unos patrones y la generativa, con imágenes, vídeos o respuestas que están generadas por las aplicaciones. Por eso, muchas veces en promociones o redes sociales se imprime el texto "creado por Inteligencia Artificial".
En cuanto a los trabajos que pueden perderse como consecuencia de estos avances, la experta y asesora de la OCDE y la Comisión Europea acude a los organismos oficiales: "Dicen que la Inteligencia Artificial va a destruir 92 millones de trabajo y generar 170 millones. El saldo es positivo, porque se desarrollan y construyen nuevos puestos".
Leal habla de "modificar", porque eso sí va a ocurrir en lo relativo a las labores y cómo se desempeñan en muchas profesiones y oficios. No cree que el beneficio a la productividad, en la que sí confía, suponga una destrucción de empleo, ya que hay tareas que se pueden automatizar.
