El pasado mes de abril William Levy (44 años) se convirtió en el protagonista de cientos de titulares a nivel mundial tras ser detenido en Miami. Fue a la salida de un restaurante argentino cuando la policía se lo llevó arrestado por supuestamente estar ebrio y molestar a los comensales de dicho local después de que los encargados le pidieran que se fuera. Acusado de intoxicación pública, alteración del orden e intrusión en una propiedad ocupada, el intérprete salió al día siguiente del calabozo tras el pago de una fianza de 500 dólares.
Tras aquello William ha guardado silencio y ha contado pocos detalles sobre la detención, pero este lunes 9 de junio ha visito 'El Hormiguero' y Pablo Motos ha querido saber qué es lo que pasó realmente tras acudir al restaurante. Lejos de quedarse callado y surfear las preguntas, Levy ha querido dar su versión de los hechos. "Hubo mucho jaleo y saliste en las noticias, un altercado en Florida...", ha comenzado diciendo el presentador.
"Sí, fue hace poco. No paso nada grave. No fue como se ha especulado. Estábamos tomando una copa el padre de uno de los chicos del equipo de mi hijo y yo. A la hora de pagar la cuenta, con todo su derecho, quiso chequear la cuenta porque habían puesto algo de más. Había una persona en la barra y empezaron a discutir. El hombre se paró en medio y yo me puse ahí porque lo mejor es evitar que la situación escale", ha revelado el actor.
Fue entonces cuando llamaron a la policía y la situación se pudo todavía más tensa. "Nos dejaban ir porque no había pasado nada. Estábamos a punto de irnos, pero las formas de echarnos estaban fuera de lugar, nos dijeron 'que os foll*n'. No eran formas, somos hombres, padres... no hay que llegar a ese punto. Me arrestaron porque quisieron, yo estaba fuera del restaurante en ese momento. Me llevaron. Pero no pasa nada, es una experiencia más en la vida", ha asegurado William, añadiendo que ahora forma parte de un club de estrellas que tienen problemas policiales.
Sobre pasar la noche en el calabozo, el protagonista de 'Bajo un volcán' ha relatado entre risas que fue una "experiencia normal". "No dormí, pero hice nuevas amistades. Me pasó algo cómico allí. Nos llevaron a la celda y ya dentro cuando nos dieron el desayuno, lo pero que he visto en mi vida, un joven al lado mío me dijo 'ey, te doy galletas por tu sandwich'. ¿De dónde las había sacado? Y me mira y las saca de un bolsillo de la camisa con una cara... Pensé que había una cámara oculta. Se lo regalé, yo no tenía hambre. Luego me di cuenta que eran las de la cena que las había guardado", ha explicado.
Levy, que ha querido quitar hierro a aquella vivencia tan desagradable, también ha bromeado con su foto policial: "La tengo colgada en un cuadro de mi casa". Además, el actor ha revelado que tal cual salió del calabozo acudió a ver el partido de su hijo. "Los de la cárcel hicieron todo lo posible para que pudiera ir. Llegué a tiempo. Mi preocupación era que llegara el el tipo de la fianza para estar porque nunca me he perdido un partido. Llamé a mi madre para que me trajera un cambio de ropa y me pudiera cambiar en el coche porque tenía peste a prisión. Tenía hambre y me comí como 15 hot dogs", ha confesado.
