"Quiero vivir. Quiero libertad”, suena a anuncio de compresas, pero no. O también. María Valverde dice que la vida es como un videojuego, que su historia de amor con Mario Casas tuvo su ‘game over’ y ahora está en otra pantalla “ganando moneditas”. También es imagen de Tampax, fresca, joven, en un continuo ir y venir. Le va que ni al pelo. Ahora, moreno y en media melena. Lo tiene así porque, por fin, no hay exigencias de guión. Se marcha a Londres sin ataduras. A hacer lo que surja. Cursos de arte, de interpretación… Con deseos irrefrenables de que un director la descubra para el teatro y la estruje. Porque confiesa que el amor ahora no es una prioridad. Lo es su familia. Lo es su trabajo y lo de enamorarse de un inglés… Puede. “O con un chino”. Bromea. En este lapso de tiempo se ha descubierto como mujer y vuelve a tener cualidades que con aquel amor había olvidado. Ahora, dice, sí que es ella: María Valverde.

 

María, ¿vives en Londres o no? Que yo ya me pierdo.

(risas) Vivo en Londres. Es que tampoco he parado mucho allí. He estado trabajando bastante… Voy con la maleta a cuestas… Pero sí, ahora, por fin, me marcho.

¿Te apetece ser anónima?

Me apetecía un cambio vital. Me apetecía estar cerca de la cultura, de la música y no muy lejos de mi familia… No quería irme a Nueva York, por ejemplo.

¿Te consideras una mujer valiente?

Mmmm… Me considero bastante valiente, sí… Es que lo más fácil es quedarse en el mismo sitio y no aprender. Lo arriesgado es salir, aprender y dar la cara.

Tengo entendido que fueron tus padres los que te dijeron, María vete ¿no?

Totalmente. Fueron ellos. Como también fueron ellos los que me animaron a ser actriz. Sin mis padres yo no habría hecho nada… Tener unos padres así es de agradecer. Ellos son mi base. Son donde piso tierra.

Y ahora, sin ataduras…

Eso es lo bonito, crecer, irte encontrando gente, ser más fuerte e impulsarte. Y no solo porque no tenga una relación. A mi me han educado de una manera nómada. Soy libre y me siento más libre que nunca.

¿Eso significa que no vamos a tener un novio inglés?

Podemos tenerlo inglés o de la China. De donde quiera (risas) pero estoy en un momento en el que estoy descubriéndome y también descubriendo gente. El fin no es tener una relación. El fin puede ser tener más cosas.

Acabar de rodar una peli en Azerbaiyán ¿no?

Acabo de terminar ‘Guernika’ de la que llegué directa de Turquía y Azerbaiyán y ha sido un shock.

¿Por?

Porque la experiencia ha sido dolorosa. Darte cuenta de lo que pasó en ‘Guernika’ ha sido muy duro tanto mental como físicamente hablando porque por un lado tuvimos la gran suerte de contar con supervivientes que nos contaron su historia, que siempre supera la ficción, y, por otro, porque rodamos el bombardeo y a veces te olvidas de que estás haciendo una película y el ejercicio es duro. Lo de Azerbaiyán fue otra cosa. Ha sido maravilloso. Das las gracias por ser actriz porque si no, de otra manera, nunca habría ido. Con viajes así te das cuenta de que las personas tenemos que viajar, con los medios que sean, pero hacerlo. Es la única manera de abrirte al mundo, de conocer otras culturas y también de sentir más respeto por lo que te rodea. Yo, con Azerbaiyán hice un viajazo, algo que podré contar a mis nietos….

¿Superas bien también los obstáculos?

Me cuesta, pero los supero. Si los atraviesas fácilmente, es que no son tan obstáculos ¿no crees?

Cuando rompiste con Mario, saltaste muchas vallas, lo contaste abiertamente y dijiste que no querías perder la naturalidad…

Y no me arrepiento de nada. Uno tiene que ser como es y lo que ha aprendido es que se tiene que mantener tu esencia ante todo, que nadie te la puede quitar. Los actores a veces nos hacemos caparazones con la vida privada y es verdad que hay ciertos sitios que se tienen que respetar, pero el hecho de ser uno mismo y que te vean como eres como persona también es importante.

¿Has madurado de golpe?

Yo creo que ha sido algo gradual. Creo que la vida son experiencias que te marcan. Como pantallas de un videojuego. Aquello es una pantalla que ya he pasado y ahora estoy jugando en otra.

¿No tenéis contacto? ¿Os felicitáis los cumples?

No… ya te digo que estoy en la siguiente pantalla. Y ganando moneditas

¿Pero habías perdido?

Nunca. Pero soy yo misma, más que antes…. Es muy difícil encontrarte como persona, ¿eh? Nadie te enseña a crecer.

¿Y qué has aprendido de ti?

Que soy muy flexible. Me adapto al cambio.

Tu prioridad ahora…

Es mi familia, mis amigos y luego mi curro.

Nada de amor.

Necesito espacio. Llenarme de otras cosas. De arte, de cursos, de música… Ahora mismo quiero descubrir el mundo. Quiero vivir. Quiero libertad.

¿Y qué más?

Teatro… quiero teatro, que llegara un director y me estrujara.