Laura Matamoros reaparece con la cara deformada por una reacción alérgica: “No puedo abrir los ojos”

Laura Matamoros ha compartido en sus redes sociales la hinchazón que tiene en su rostro debido a una reacción alérgica que ha preocupado a todos sus seguidores

Sergio Rapado
Sergio Rapado

Periodista especializado en corazón y televisión

Laura Matamoros
Gtres

Son muchos los famosos de nuestro país que comparten todo tipo de situaciones a través de sus redes sociales. De hecho, en muchas ocasiones supone un altavoz para denunciar determinados aspectos pero también para dejar claro el mal momento que atraviesan. Es lo que ha pasado con Laura Matamoros (32 años) que ha puesto de manifiesto un escenario que sufren muchísimas personas como es la alergia, reapareciendo con la cara totalmente deformada.

No es la primera vez que la hija de Kiko Matamoros revela en sus redes sociales cualquier situación médica o cualquier bache de salud que sufre. Hace unos meses se sinceró sobre su miedo a quedarse ciega al compartir un diagnóstico médico. Afortunadamente todo quedó en un pequeño susto pero ahora ha vuelto a preocupar a todos sus seguidores al aparecer con el rostro bastante hinchado debido a esta situación que afecta a muchísimas personas de nuestro país.

Su cara deformada

El verano se está acercando y las altas temperaturas provocan que muchos de nuestro país busquen un poquito de sol y mar para desconectar. Laura ha disfrutado el fin de semana en la costa gaditana, tal y como ella misma ha compartido en sus redes sociales. Al regresar a la capital del país la situación ha cambiado bastante para ella, ya que en Madrid los niveles de polen están siendo bastante altos.

Ella misma compartía en la mañana de este lunes una imagen que alertaba sobre la preocupación de lo que le estaba pasando. Su cara se veía deformada debido a esta pequeña inflamación por la alergia. “Llegar a Madrid y morir de alergia. No puedo abrir los ojos”, escribía la influencer en una imagen en el espejo de su ascensor mientras se dirigía a entrenar como ella misma comentaba.

Laura Matamoros
Instagram @_lmflores

Laura no ha querido ofrecer más detalles de lo que sucede ni a lo que es alérgica pero todo apunta a que se trata de algo estacional. No obstante, para tranquilizar a todos sus seguidores la influencer ha compartido más historias temporales de su entrenamiento jugando al tenis, por lo que ha significado un alivio para los que habían pensado que tenía una situación mucho más grave al reaparecer con su cara de esta manera.

Dejando a un lado la preocupación, también ha querido poner de manifiesto una situación que atraviesan muchos madrileños pero también muchos españoles. No es la única que sufre las consecuencias de la alergia en la primavera, siendo este año especialmente duro por todo lo que ha llovido que ha provocado que los niveles aumenten y las secuelas sean bastante peores que otras temporadas.

El temor por quedarse ciega

Laura es consciente de la enfermedad que padece su padre con respecto a uno de sus ojos. Por ello, hace unos meses compartió en sus redes sociales el temor que sentía a la hora de acudir a un experto para comprobar si ella también podía verse afectada por esta situación. No obstante, se armó de valor para visitar a un médico y enfrentarse a sus miedos, además de compartir los resultados con todos sus seguidores.

“Me da miedo quedarme ciega”, confesaba con muchísimo nerviosismo. Laura sufre un glaucoma en uno de sus ojos y ello provoca la pérdida de visión, motivo por el cual sentía esta angustia. De hecho, ella misma revelaba que llevaba meses comprobando esta pérdida de visión y razón por la cual no tuvo más remedio que acudir a un médico para poder conocer el diagnóstico.

No obstante, ella reconocía que lo idóneo no era retrasar la visita al médico pero el temor había podido con ella. “No me reviso por miedo a los resultados”, declaraba en sus redes sociales. “La verdad es que tengo que reconocer que me dan miedo los resultados de los médicos, sobre todo sabiendo cuál es mi diagnóstico principal”, añadía con total sinceridad sobre esta situación.

De hecho, explicaba esta dolencia principal. “Los que me seguís desde hace muchos años, ya sabéis que tengo un glaucoma en el ojo derecho de tensión baja. Para quien no sepa lo que es, es pérdida de visión del nervio, porque se va oprimiendo y va dejando sin visión al ojo”, revelaba. Tras ello procedía a compartir los resultados tras su exploración, instante en el que estaba acompañada por su hermano Diego Matamoros que había calmado sus nervios. “Gracias a Dios todo sigue en orden. Veo un poco menos, pero lo más importante es que el nervio óptico está bien”, concluía.