Isabel Preysler cumple 70 años con su eterno pacto con el diablo

Poco o nada queda de esa joven de 17 años que sucumbió a los deseos de Julio Iglesias a quien conoció en una fiesta. Se casaron el 29 de enero en 1971 en un pueblo de Toledo y después de infinidad de infidelidades y tres hijos en común: Julio José, Enrique y Chabeli decidirían separarse.

Su divorcio de Julio Iglesias ocupó infinidad de titulares por todo el mundo y, después, su arduo currículum amoroso posterior no se quedaron atrás y es que si de algo no se arrepiente es de haber actuado por amor. A lo largo de su vida pasó tres veces por el altar. En 1980 se casó con Carlos Falcó de quien se separó cinco años después y en 1988 volvió a enamorarse, esta vez, de Miguel Boyer junto a quien estuvo hasta el día de su fallecimiento en 2014. Su relación con Mario es especial y, por el momento, no hay planes de boda.

Aunque a lo largo de los años se ha hablado mucho de la "mala" relación que Isabel Preysler mantiene con sus hijos, sobre todo con los que viven lejos de España, pero nada más lejos de la realidad. Si hay algo que hace muy feliz a la socialité es poder reunir a todos sus hijos y nietos, algo que lamentablemente hace un año que no se produce. En la actualidad se tiene que conformar con largas jornadas de videollamadas.

Pero si hay algo que se resalta en cada aparición pública es el pacto que ha hecho con el diablo. A pesar de contar con 70 años mantiene una figura e imagen envidiable. Una dieta equilibrada, cóctel de vitaminas, su genética oriental y, por qué no decirlo, la ayuda del bisturí le han ayudado a mantenerse a la perfección. "A este paso, mi madre terminará siendo más joven que yo", bromeaba Tamara Falcó.

Sus apariciones en los medios de comunicación han ido disminuyendo. Muchos lo achacan al paso de los años, mientras que otros profundizan en un cambio de actitud por parte de la protagonista. Sea como fuere, es y siempre será la Reina de corazones.