Carmen Borrego (58 años) ha vuelto. Después de estar ausente durante unas semanas, la hermana de Terelu Campos ha reaparecido en 'Vamos a ver' para mostrar en directo el resultado de su operación estética, que reveló en exclusiva para la revista 'Lecturas'. La colaboradora ha llegado con una amplia sonrisa y ha saludado a todos sus compañeros, que no podían evitar admirar el gran trabajo que había llevado a cabo el doctor Javier De Benito.
La tía de Alejandra Rubio (24 años) ha hablado de cómo fue esta intervención y cómo está siendo la recuperación. También, ha hablado de su comentario sobre haber hecho un testamento antes de pasar por quirófano. Era entonces cuando Joaquín Prat le preguntaba si su hijo recibiría solo al legítima, que es la parte que no se puede negar a un hijo aunque se le desherede.
Carmen, muy clara, ha revelado cómo repartió esa herencia. "A mis hijos les corresponderá el 50% a cada uno. Sin dudarlo. Yo no soy la Pantoja, soy Carmen Borrego. Mis hijos tendrán todo por igual, como lo ha tenido toda la vida", ha confesado, muy firme. Una decisión con la que muestra que, a pesar de la tensión vivida con su primogénito estos últimos meses, no tiene ninguna intención de romper su vínculo con él, ya sea personal o económico. ¿Y su marido? "José Carlos tendrá lo que le corresponda, pero desde luego mis hijos más que José Carlos", ha dejado claro.
Los días de recuperación de Carmen Borrego tras su operación estética
Hace tan solo 18 días que Carmen Borrego pasó por quirófano. Un tiempo muy breve en el que, aunque no le han quedado hematomas ni cicatrices en la cara, ha tenido que tener paciencia para lograr un total recuperación. "Cuando uno se opera de estética lo que tiene de bueno es que no es una cosa dolorosa, es una cosa más incómoda. Por ejemplo, a la hora de dormir que no puedes dormir en la postura que quieras", ha explicado.
Las curas posteriores también son parte de este proceso. En el caso de Carmen, ha sido su marido el encargado de cuidarlas. " Tengo el mejor enfermero que es José Carlos, me hace las curas, y creo que he sido bastante buena enferma, me he quejado poco. A José Carlos le gusto con papada o sin papada", ha dicho, con un brillo de amor en la mirada.
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A pesar de todas las consecuencias, Carmen está muy contenta con el resultado. Hace ya tiempo que quería retocarse esta parte de su cuerpo, pero no había podido. "A mi el cuello me ha dado mucho trabajo porque no es la primera vez que me lo opero. Yo tenía el cuello muy mal, lo tenía muy descolgado", ha explicado a sus compañeros.
Al parecer, en una intervención anterior, la anestesia le sentó muy mal. "Mi doctor creyó que con ese efecto, todo lo que se había tensado, se destenso...", ha compartido. En esta línea, también ha hablado del famoso tartazo que le lanzaron durante su participación de 'Gran Hermano. "Si yo estoy en el concurso y me dan un tartazo, es algo que me pueden dar. Pero si entras con un certificado médico de que te acabas de operar... Quizá no es el mejor momento", ha reflexionado.
Tras esta experiencia, Borrego intentó "hacer un arreglo y no salió". Hasta ahora. Eso sí, ha querido confesar todas las realidades de este procedimiento, como el hecho de que no se reconocía en el espejo después de la intervención. "He estado muchos días sin verme. Me miraba y no me veía. Ahora me empiezo a ver", ha confesado.
José María Almoguera se pronuncia sobre los últimos retoques estéticos de su madre
Como lleva pasando en los últimos meses, Prat le ha preguntado a Carmen por la situación con José María Almoguera. "Noto a mi hijo mucho más tranquilo, más relajado… Ojalá la reconciliación sea cuanto antes, porque para mí sería el regalazo de Navidad el poder dejarnos de tonterías. Muchas veces las cosas tienen su momento y su enfado, pero ya. Hemos hablado porque hay contacto por quien tiene que haberlo, pero ya está. Estoy abierta y lo sigo estando a la reconciliación con mi hijo, los dos viviríamos más tranquilos y más felices", comentaba.
Pero, ¿Qué opina su hijo de los últimos retoques de su madre? Era en el programa 'Socialité' donde la expareja de Paola Olmedo ha hablado de su progenitora. "Ella está bien, en la portada sale muy guapa y ya está", decía, de forma escueta, pero educada. Una conducta cordial que deja la puerta abierta a una posible reconciliación.