La reina Letizia ha comenzado el 2022 con perfil muy bajo. Tras la tradicional ceremonia de la Pascua Militar, que la consorte presidió el pasado 6 de enero junto al rey Felipe, su paradero es una auténtica incógnita que se extenderá hasta el próximo miércoles 12 de enero. No será hasta ese día cuando doña Letizia retome sus compromisos profesionales cara al público con una reunión con la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER). Esto, eso sí, no significa que no vaya a trabajar, algo que hace a diario en su despacho del palacio de la Zarzuela.
Aunque un día no cuente con un acto público, la reina Letizia cumple a rajatabla con una rutina con la que no desatiende en ningún momento su labor dentro de la casa real. La mujer de Felipe VI se levanta a diario a las 7:00 horas y desayuna junto con su familia. Si ese día no tiene aparición, y por lo tanto no tiene que acudir a su peluquera, Luz Valero, la consorte es la encargada de llevar a la infanta Sofía al colegio Santa Maria de los Rosales, a pocos kilómetros de distancia de su residencia.
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Casa Real
De vuelta, la reina Letizia comienza una jornada laboral fuera de la vista de todos, pero no por ello menos importante. Sola o con Felipe VI, la madre de la princesa Leonor invierte la mañana en asuntos de lo más diversos, tal y como han confirmado fuentes cercanas a la Casa Real a ‘Vanitatis’. “Tiene muchos contactos de despacho con temas que después tienen proyección pública o hace un seguimiento de asuntos que ha tratado en su agenda”, han explicado a la mencionada publicación.
Además, en los días que no tiene acto público, doña Letizia también se encarga de la preparación de sus propios discursos, que redacta ella misma, revista e intenta dar un toque personal para mostrar lo involucrada que está con el tema.
Por último, doña Letizia preside algunas reuniones de las que no se informa públicamente, algo que se ha recuperado tras su cancelación por la pandemia, con los que se implica en las organizaciones y causas que más le interesan. Una extensa jornada de trabajo en palacio que hacen que muchos apunten a que la reina hace mucho más fuera de las cámaras que lo que realmente se ve.