El matrimonio de la infanta Cristina (59 años) e Iñaki Urdangarin (57 años) terminaba oficialmente el 24 de enero del año pasado, fecha en la que los exduques de Palma firmaban el divorcio de mutuo acuerdo en Barcelona, poniendo fin a esa relación que se hizo oficial el 4 de octubre de 1997, día en el que pasaban por el altar para darse el 'sí, quiero'. Estos parecen tener poca o casi ninguna relación desde que sus vidas tomasen caminos separados, habiendo sido bastante llamativo el último gesto de Iñaki a pocos días de que su ex cumpla 60 años.
El gesto de Iñaki Urdangarin con su exmujer, la infanta Cristina
Como decíamos, la hermana del rey está cerca de entrar en los sesenta, nueva década muy importante para cualquier persona y que, al parecer, piensa celebrar de manera íntima y discreta, tal y como informan desde ‘Mujer Hoy’. Esto puede que tenga mucho que ver con la más reciente decisión de su ex y padre de sus hijos, que acaba de dar su primera entrevista en 15 años.
El exduque de Palma se sinceró con ‘La Vanguardia’ en una íntima charla en la que habló de diferentes temas, siendo una conversación muy publicitaria sobre su nuevo proyecto, Bevolutive, hablando en profundidad de la asesoría de coaching deportivo que acaba de montar, lo que no ha podido evitar que el foco de atención se ponga de nuevo en su ex, cuyo cumpleaños está cada vez más cerca.
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Ha sido bastante llamativo el hecho de que Iñaki Urdangarin no hable en esta entrevista de nadie de su exfamilia política, dejando a un lado todo lo relacionado con la Casa Real y sus componentes, algo que el citado medio cree que se puede deber a que este habría firmado este silencio hace tiempo, siendo una situación que el exdeportista conoce de sobra, habiéndosele impuesto este silencio real.
Sobre esta entrevista, Pilar Eyre, experta real, cree que “tanto Zarzuela como la infanta Cristina han debido dar su visto bueno” a la misma, aunque este medio afirma que haber lanzado su primera entrevista en tanto tiempo a pocos días del cumpleaños de la madre de sus hijos es “como una bofetada sin manos a la infanta”.
La nueva vida de Iñaki Urdangarin
En esta Iñaki aseguraba que su “vida es muy rutinaria. Madrugo, hago deporte, me pongo a trabajar después y luego me dedico a distintas aficiones y hago las labores de casa junto a mi pareja”, confesaba, añadiendo que “cuando tengo a mis hijos pues disfruto de ellos. Es una vida ordenada. Me he vuelto a reencontrar con cosas de la sencillez, que después de todas las etapas de mi vida es lo que más me apetece. Mi vida ahora no llama la atención a nadie. Tengo la sensación de que se me ha escapado el tiempo y quiero aprovecharlo muy bien”, explicaba.
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Tras haber estado en prisión, parece que Iñaki ha conseguido empezar de cero y comenzar una nueva vida con una nueva pareja, Ainhoa Armentia, cerca de sus hijos y ahora con este proyecto entre manos, siendo una muestra de lo mucho que se ha esforzado para llegar a este punto en su vida: “Mirar a la persona con unos ojos como diciendo este señor se ha vuelto a levantar después de todo lo que le ha ocurrido y está aquí para ofrecer algo por qué no darle una oportunidad”, dice en esta publicación.
Urdangarin también ha querido hablar de su hijo Pablo, el más público de todos por haber seguido los pasos de su padre dentro del deporte, siendo una figura bastante destacada en el balonmano. "Soy muy pesado con mi hijo", reconocía en esta entrevista, asegurando que “Pablo es fantástico porque escucha". El joven no tenía claro a qué deporte dedicarse, pero su padre le aconsejó que "en los deportes de equipo, como persona te vas a formar muchísimo mejor. Y yo te recomendaría que cogieses algo donde sacases partido a tus talentos”.
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Este le dio una serie de consejos a su hijo: "El primero, humildad, que si se creía algo, al día siguiente no sería nada. Luego también le decía que para jugar a balonmano tiene que tener una actitud de guerrero. No puedes estar a medias tintas ni quejarte de que no te ponen o de que juegas en una posición que no te gusta. Y tercero, la gestión de las victorias y las derrotas, donde tras las victorias se vuelve a empezar de cero y tras las derrotas se pueden extraer cosas buenas para el futuro".