De Letizia a María Teresa de Luxemburgo, todas las reinas que se han cogido al Privilége du blanc en la misa del papa León XIV

Hoy Roma está celebrando por todo lo alto al papa León XIV con la misa de comienzo de Pontificado del mismo, un evento que llega tres semanas más tarde del solemne funeral de Estado del papa Francisco y en el que hemos vuelto a ver reunidos en la capital italiana a un gran número de jefes de Estado y de Gobierno, mandatarios de todo el mundo y representantes de Casas Reales como nuestros reyes, Felipe VI (56 años) y Letizia (52 años), cuyo look ha sido uno de los más elegantes. Nuestra monarca, junto a otras royals europeas, han destacado entre todas las invitadas llevando total look blanco, un privilegio al que no se pueden acoger todas las reinas y que hoy las ha hecho destacar.

El privilegio de blanco de Letizia y otras monarcas

Nuestros monarcas han sido de los primeros en aparecer por la plaza de la Basílica de San Pedro para ser testigos del inicio del ministerio petrino de Robert Francis Prevost, el Papa número 267 de la Iglesia Católica y el primero de origen estadounidense en la historia de la institución. 150 delegaciones se han reunido para esta especial cita para todos los católicos, que se han acercado a esta zona para ver a León XIV recibir el anillo del pescador, símbolo de su autoridad apostólica, y el palio, una estola de lana que representa el vínculo entre el pontífice y la Iglesia universal. 

Allí ha destacado nuestra reina y tres monarcas más, todas vestidas de blanco. Estas han hecho uso del llamado Privilége du blanc (privilegio de blanco), algo que otorga el Vaticano a las reinas católicas permitiéndolas vestir de este color en audiencias y otro tipo de actos como este con el Santo Padre en Roma, no aplicándose a funerales, donde deben ir de negro. Además de la reina Letizia, pueden ir de blanco la reina Sofía, la gran duquesa María Teresa de Luxemburgo, Charlene de Mónaco y Paola y Matilde de Bélgica, a las que hoy pudimos ver en Roma vestidas de este elegante y llamativo color.

Se trata de algo que sólo está permitido pata reinas, no para princesas y simboliza “la pureza, la inocencia y la paz y se otorgó a estas monarquías por haber mantenido su fidelidad a la Iglesia Católica, especialmente durante la Reforma Protestante”, tal y como explican en ‘¡Hola!’. En Lecturas pudimos hablar de esto con María José Verdú, experta en protocolo, que explicaba que "se requiere que la cabeza esté cubierta con un velo o mantilla. En el caso de las reinas españolas, se permite el uso de la peineta y la mantilla tradicional española, mientras que en otras casas reales se opta por velos más sencillos". Aun así, Letizia ha decidido no llevar peineta, un accesorio que no suele lucir y con el que no parece sentirse cómoda.

Esta nos cuenta que, de haber usado mantilla hoy, “la reina Letizia habría reafirmado su posición como parte de una institución respetuosa con las normas internacionales y, al mismo tiempo, mantiene la imagen de una monarquía que, aunque moderna, no olvida sus raíces históricas y religiosas”.

El look de las reinas católicas para este acto

Como siempre, nuestra monarca ha vuelto a hacer alarde de su saber estar y su gran elegancia a la hora de vestir para este acto tan señalado. Esta ha vuelto a seguir la tradición y el protocolo con un vestido blanco de la firma Redondo Brand, apostando por la moda española con esta prenda de silueta midi y realizado en crepé blanco con cuello cerrado y manga larga, destacando el drapeado frontal asimétrico.

Nuestra reina lo ha combinado con unos zapatos de tacón bajo en color tierra y ha optado por llevar una delicada mantilla y unos sencillos pendientes de diamantes.

Además de nuestra monarca, también hemos visto llegar a esta cita vestida de blanco a la gran duquesa María Teresa de Luxemburgo, Charlene de Mónaco y Matilde de Bélgica.

Mientras que Charlene ha optado por un vestido de manga larga y cuello cerrado creado con un tejido con lunares en relieve, que ha acompañado de una mantilla y zapatos blancos, Matilde de Bélgica optaba por una falda larga de tablas plisadas que ha acompañado de una chaqueta abotonada de manga larga y cuello cerrado que contaba con un fino cinturón que marcaba si figura creando un pequeño péplum. Esta ha completado el look con una mantilla XXL, gafas oscuras de sol y bolso y zapatos a juego con el vestido, de color blanco. 

Y por último tenemos a la gran Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, que elegía el vestido más diferente a todos optando por una pieza larga con escote en V y de tejido troquelado con mangas tres cuartos que constaba también de un cinturón en este mismo tejido XXL. Lo ha acompañado de unos pendientes en los que destacaba una gran perla y unos zapatos de tacón bajo en tono beige.