La boda del alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y Teresa Urquijo ha logrado posicionarse como uno de los eventos del año. Claro que el parentesco de la novia con la Familia Real y la presencia del rey Juan Carlos y sus hijas Elena y Cristina ha hecho mucho por la labor. La abuela de Teresa Urquijo, prima del rey emérito, ha logrado que gran parte de la nobleza del país acuda a un enlace con más de 500 invitados. Una boda que rivaliza con la de cualquier infanta y que dejaba al propio alcalde nervioso por la expectación. No es para menos.
Si la infanta Elena acudía junto a sus dos hijos, Froilán y Victoria Federica, su hermana Cristina lo hacía solo con uno de sus vástagos. Juan Urdangarin, el mayor de la familia, era el encargado de acompañar a su madre como ya ha hecho en otras ocasiones. Cabe recordar que los compromisos y situaciones de sus otros hijos lo hacían más complicado. Irene se encuentra fuera de España, Pablo centrado en su carrera deportiva y Miguel sufría hace pocas semanas un aparatoso accidentes esquiando.
La infanta Cristina se volvía a dejar ver sonriente y feliz. La separación definitiva de Iñaki Urdangarin y su nueva situación personal y física han hecho que la hija de los reyes eméritos se muestre más relajada y cómoda. Y eso se nota en cada una de sus ya muchas apariciones.
La elección estilística de la infanta Cristina para la boda
Para la boda, la infanta Cristina ha sorprendido al decir adiós al vestido y optar por un conjunto de pantalones y blusa holgada de color marrón.
![Infanta Cristina y Juan Urdangarin](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1800"%3E%3C/svg%3E)
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La infanta Cristina ha demostrado que con un conjunto de pantalones y blusa se puede tener un look de invitada de diez. Lo ha hecho a través de unos pantalones holgados con los que se ha asegurado ir cómoda y estilizada. Unos palazzo como los de ella, que se caracterizan por el tiro alto y la pernera extra ancha, son perfectos para no marcar nada pero sin perder ese efecto tan favorecedor de alargar las piernas. Esta vez los ha llevado en color marrón, una opción muy elegante que para las bodas se convierte en la mejor alternativa al negro.
Mismo marrón que ha llevado en su blusa, logrando así un look monocolor. Una blusa que también es holgada y que cuenta con detalles tan originales como sus mangas fluidas, el cuello mao o las tachuelas, que están presentes por toda la prenda, que aportan ese toque original al look.
Como zapatos, la infanta Cristina se ha decantado por unos tacones también en marrón par así no romper con el color y mantener ese efecto estilizador al que da lugar llevar las prendas y el calzado del mismo tono.
Además, la infanta Cristina ha llevado un accesorio capaz de elevar el look. En la mano, la hermana de la infanta Elena ha portado un fular estampado con el que ha encontrado la mejor solución para este día de entretiempo. En caso de tener frío, doña Cristina puede recurrir a él para aportar un toque de color a un estilismo con el que se ha colado entre las mejores vestidas de un enlace que ha contado con más de 500 invitados.
El moño de invitada de la infanta Cristina
![Moño infanta Cristina](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 800"%3E%3C/svg%3E)
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El toque más sofisticado de su look lo ha puesto a través del peinado. La infanta Cristina se ha decantado por un moño bajo con detalles románticos que ha llevado con la raya al lado. Un peinado elegante y con el que ha logrado dar todo el protagonismo a su look.