"Ahora sí, 113 días después vuelvo a casa. Cuantas noches de insomnio echando de menos mi casa, mi gente, mis rutinas, mi terreta... mi vida", escribía Borja González (31 años) desde el tren que le llevaría hasta Valencia tras su inolvidable aventura en 'Supervivientes 2025'.
Para sorpresa de muchos, incluido él mismo, Borja se hacía con la victoria final y los 200.000 euros del premio. Un dinero que ha decidido invertir en un coche y en una nueva casa.
Aunque los cuatro finalistas llegaron a España el pasado lunes, no ha sido hasta ahora cuando Borja ha podido volver a casa ya que durante toda la semana ha tenido que hacer frente a varios compromisos profesionales, entre los que se encontraba el debate final de 'Supervivientes'.
Tras dos horas de viaje, en la estación le esperaban su novia, Ana López, y el pequeño Luca. Ha sido la influencer la que compartía en redes sociales el momento del reencuentro que ha dejado alucinado al valenciano.
El gesto de Luca que ha dejado alucinado a Borja
"¡Mi niño!", se le escucha decir a Borja ilusionado por lo que supone estar de vuelta en casa después de tanto tiempo. Lo que no esperaba es el gesto que el pequeño de un año le iba a dedicar nada más verle. A pesar de su corta edad, Luca frotaba sus dedos como símbolo del dinero, un gesto inesperado que provocaba las carcajadas de sus padres. "Dinerito", se reía Ana. "¿Ya me estás pidiendo dinero? Solo quieres dinero. El dinero ya lo traje, se llevó tu madre el cheque", decía Borja entre risas. "Esto es para lo que me quiere mi familia", reaccionaba él en tono jocoso unas horas más tarde compartiendo el momento en redes sociales.
Instagram @borjagonzalez
Nada más alzarse con la victoria, Borja quiso compartir el premio con la madre de su hijo y es que, tal y como él mismo aseguró, nunca hubiera podido irse a Honduras si no fuera por ella. "¡Lo hemos conseguido!", dijo en ese momento de euforia. "Si ella no se hubiera quedado con mi hijo yo nunca habría ido a 'Supervivientes'. A lo mejor ha sido más dura la supervivencia de ella fuera que la mía dentro", declaraba en el debate final alzando el trabajo de su mujer.
Borja González, ganador de 'Supervivientes 2025'
Aunque no fue fácil dejar a un bebé en casa, Borja González aceptaba el reto con el objetivo de llegar a la gran final. Lo que nunca imaginó el que fuera participante de 'La isla de las tentaciones' es que después de tres intensos meses de concurso se alzaría con el cheque de 200.000 euros.
La realidad es que Borja no llevó el peso del reality ni mucho menos. Sin embargo, su carácter afable y relajado le permitió forjar alianzas que le llevaron en volandas a la gran final. "Despertando de este sueño... Después del nacimiento de mi hijo, la final fue el mejor día de mi vida", reconocía en redes sociales. "Ha sido la experiencia más dura, sin duda, pero también la que más me ha enseñado y cambiado, no la olvidaré jamás", advertía.
Telecinco
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Al margen de la supervivencia, Borja llevaba arrastrando una fuerte crisis en su relación con Ana. Contra todo pronóstico, la distancia le permitió poner en orden sus ideas y sus sentimientos y ahora "quiero todo con ella", reconocía emocionado. Sus planes más inmediatos son disfrutar del verano en familia pero también están barajando la idea de pasar por el altar, un paso al frente con el que pondrían la guinda a su bonita historia de amor.
"Un honor acabar mano a mano con mi hermano, Álvaro Muñoz Escassi, fue un sueño llegar a la final contigo, eras mi ganador! Ahora por fin voy a disfrutar de mi Ana y Luca, de los que no me pienso volver a separar!! Gracias por todo este apoyo de corazón!! Estoy pensando cómo puedo devolvéroslo", se despedía.