El momento 'Tierra, trágame’ que ha vivido Aitor en 'First Dates' con una influencer argentina: "Es abrumadora"

Una cita es impredecible. Por mucho que pienses con antelación lo que vas a preguntar y lo que quieres transmitir a la otra persona, nunca sabes lo que va a suceder. Mucho más si se trata de una a ciegas. En 'First Dates' son unos expertos a la hora de emparejar a los solteros que llevan cada noche al programa. Sin embargo, con Jacqueline (30 años), una influencer afincada en Madrid, se han lucido.

Es una mujer intensa y enérgica. Razón por la cual no toma alcohol porque, como confiesa, siempre está muy arriba. "Me gusta llamar la atención, conocer a un montón de personas que te aporten y es importante estar abierto a escuchar porque nunca se sabe con quién te puedes encontrar", ha dicho a su llegada al dating show.

Se dedica a crear contenido en las redes sociales sobre sus citas amorosas. "Grabo todas mis desgracias en el amor. Tengo muchas, como cuatro a la semana", ha admitido. Por ahora, su vida es una comedia dramática, aunque esperaba que eso cambiase gracias a su cita de este miércoles. Siempre que tiene una se imagina a la persona que tiene delante en el altar, cómo sería en su faceta como padre, cocinando, enojado… Busca a un chico "inteligente y romántico". Con Aitor (28 años), un agente de telemarketing de Sevilla, no han fallado en eso.

El joven ha confesado que no se ha enamorado nunca (aunque hasta hace poco estaba convencido de que sí que lo había estado en dos ocasiones). Quiere encontrar a la persona adecuada para abrir su corazón, pero, por desgracia, todo apunta a que Jacqueline no es esa persona. Eso sí, se lo ha pasado bastante bien durante la cita. Como bien ha apuntado, no hay nadie capaz de aburrirse con ella. 

Las primeras impresiones para Jacqueline han sido buenas. Le ha encantado su acento andaluz. A él también le ha gustado ella cuando la ha visto: "Físicamente me parece una niña guapa. Tiene un cuerpo bonito y es atractiva, y con la personalidad que tiene, llama la atención". Lo que no sabía Aitor es de su grado de intensidad. No ha tardado en averiguarlo.

Han chocado ya de primeras. Ella es vegetariana y él un amante de la carne. "Que coma animales, me parece terrible", ha confesado a las cámaras de 'First Dates'. La soltera no ha parado de preguntarle cosas. No ha tardado en introducir el tema de los hijos y la boda. "¿No te casarías conmigo?", le ha soltado. Aitor se ha quedado muy sorprendido: "Ha ido a cuchillo. No me ha dado tiempo a nada. Ya estaba en plan voy a ser tu mujer".

Las caras de Aitor no han sido suficientes. No se ha cortado. Jacqueline ha seguido con el tema. "¿Crees que no te podrías enamorar de mí? Si te enamoras, ¿te casarías?", le ha preguntado. El andaluz le ha dado un no por respuesta. "Yo creo que te puedo transformar tranquilamente", le ha espetado ella. A las cámaras de 'First Dates' ha reconocido que con su ex le pasó lo mismo. Estuvo siete años tratando de que le pidiese matrimonio porque es algo que entra en sus planes inmediatos.

No es el momento más surrealista que ha vivido Aitor durante la cena. Otra de las cosas que le ha desencajado ha sido cuando le ha preguntado sobre las muchas amigas que tiene. Al decirle que se lió con su mejor amiga (aunque ahora no hay nada más), ella ha vuelto a insistir con el tema de la boda.

"Tu amiga no va a venir a nuestra boda", le ha comentado. "Entiendes que te acabo de conocer y esto puede durar muchos años", ha añadido. No hay duda de que, después de lo vivido en la cita, Aitor estaría pensando que la cosa no iba a cuajar. "Soy una persona intensa y necesito a alguien que me frene. Si me suma, como ella, lo complica todo bastante", ha admitido el soltero.

El peor momento ha llegado un poco después, cuando Jacqueline le ha preguntado qué nota le daría a la cita. "Siete y medio u ocho. Hay que darle un poquito más de emoción todavía", ha contestado. Su respuesta no ha gustado a la argentina. "¿Un siete? ¿Sabes lo que significa siete? ¿Qué es un siete? Es un ‘tapa lástima’. ¿Sabes qué? No te voy a dejar afuera, pero tampoco te voy a hacer feliz. Si me das un siete, significa que aquí no hay nada", ha dicho con gesto de desaprobación. Ni siquiera las explicaciones de Aitor le han valido para calmarse. 

Es lógico que después de esto, tanto Aitor como Jacqueline hayan dicho no a un segundo encuentro. No se han entendido. "Divertida ha sido la cita, es imposible aburrirse contigo. Me sorprendiste para bien y para mal. Tu intensidad es abrumadora", le ha confesado Aitor.