Si hay un mantra en el que coinciden todos los expertos en piel es en la necesidad de usar protección solar todo el año. Pese a ello, su uso se dispara cuando suben las temperaturas porque en primavera y verano, además de haber una mayor incidencia, es cuando más nos exponemos de forma directa al sol y por tanto, nos preocupamos más de estar bien protegidas.
Sin embargo, el conocimiento del uso del protector solar aún tiene muchas lagunas y falsos mitos que derribar por los que más saben de piel. No todas saben cuánto hay que aplicarse, cada cuánto reaplicarlo, con qué activos se puede o no combinar...
Por suerte, el farmacéutico Eduardo Senante ha respondido a muchas de las dudas que tienen sus clientas y seguidoras en Instagram (@farmaciasenante). Va a sorprenderte con algunas de las ideas generalizadas sobre el protector solar que son totalmente falsas.
@pau_eche
¿Dejo la vitamina C en verano?
Uno de los primeros mitos que desmonta el experto es el de que la vitamina C provoca manchas en la piel en verano. "FALSO. De hecho, te va a ayudar a luchar contra ellas, puesto que es antioxidante y despigmentante. Úsala con protector solar, y si aún así se te oxida, pásate a un sérum formulado con vitamina C estabilizada", explica en su cuenta de Instagram. Aunque tranquiliza al asegurar que estas son manchas que se van con un lavado o exfoliación regular.
Según explica, "debemos seguir usando la vitamina C junto con la protección solar en el día a día porque nos va a ayudar a que nos salgan menos manchas".
Retinol y protección solar: ¿amigos o enemigos?
"¿Retinol en verano es peligroso? FALSO. Ni sensibiliza más ni aumenta las manchas, sigue con tu rutina y sigue utilizando protección solar. Eso sí, si quieres iniciar una retinización quizás lo dejamos mejor para después del verano", explica el farmacéutico.
Asegura que no tiene sentido estar 6 meses aplicando retinol en nuestra rutina antiedad para luego estar otros 6 meses sin él. La constancia es clave con este activo antiedad de eficacia demostrada, sin embargo, no veremos resultados hasta pasado un tiempo y siempre que mantengamos nuestra rutina de forma consistente en un largo periodo. De ahí que cortar el tratamiento en primavera-verano haga que lleguemos a disfrutar de esos beneficios.
Uso inadecuado de sprays, sticks y cremas solares con color
Eduardo Senante adora los formatos que ayudan a mejorar nuestra rutina desde el cuidado facial. Los sprays solares, los cómodos sticks y las versátiles cremas solares con color, pero advierte de que su uso debe ser consciente y cuidadoso para que la protección solar sea la adecuada.
"El ser humano es comodón por naturaleza y entre una leche solar y spray solar elegimos el spray. El problema es que si no lo usamos correctamente, tu piel o la de tus hijos no estará tan bien protegida del sol como crees. El spray solar hay que frotarlo para que se distribuya por todas las zonas y hay que aplicarlo a 3 centíemtros para que el aire no se lleve el producto. Tenemos que hacerlo como si fuera un spray de pintura y hubiera que pintar todas las zonas del cuerpo, no como un spray de perfume. Y nos recuerda que los estudios se hacen aplicando 2 mg de protector solar por centímetro cuadrado de piel y para el rostro los dos dedos y esto con un spray es más difícil de conseguir que con una leche solar".
Y nos da un dato de lo más interesante, según la Academia Americana de Dermatología un spray solar bien aplicado duraría 3 días a un adulto y el farmacéutico sabe que a muchas personas les dura todo el verano... "Tenemos una falsa sensación de protección solar, más riesgo de quemaduras solares y más boletos de cáncer de piel", añade.
Esta misma preocupación con la cantidad de protección solar aplicada la traslada a los sticks solares (que generalmente usamos en el rostro) y a las cremas solares con color. Normalmente no damos todas las pasadas necesarias de estos stick,podrían ser más de 10 para conseguir la cantidad de solar que se ajusta a la protección que indican.
En cuanto a los solares con color, también somos más precavidas para no dejar una sensación de textura pegajosa o de color demasiado subido con este producto, de ahí que los expertos avisen de que de usarlo lo ideal es hacerlo con una doble protección. Aplicar primero un solar sin color y terminar con el que llevar pigmentos pudiendo usar la cantidad al gusto sin dejar de proteger la piel correctamente.