Íñigo Onieva se ha convertido en uno de los hombres más buscados del país. Su paradero es un misterio desde que saltara por los aires su compromiso con Tamara Falcó el pasado sábado, 24 de septiembre, tras la filtración de un vídeo en el que aparecía besándose con otra mujer. Su círculo más íntimo asegura que el joven, que estaría recluido en la casa familiar, está "destrozado" y, por el momento, no tiene fuerzas para afrontar las preguntas de la prensa.
El silencio de Íñigo Onieva ha colocado el foco en los miembros de su familia. Aunque en un principio su madre no dudó en hablar del sufrimiento de la expareja, el huracán mediático ha llegado a un nivel que se han visto totalmente sobrepasados por la situación. Prueba de ello es que tanto su madre Carolina Molas como sus hermanos Jaime y Alejandra se han mostrado un tanto tensos con la prensa congregada a las puertas de su casa.
A diferencia de Alejandra, que ha preferido no hacer referencia al escándalo, este fin de semana era Jaime quien rompía su silencio para mostrarle su apoyo incondicional a Íñigo. Unas palabras de aliento con las que deja constancia de que el empresario no está solo y que llegaban solo unas horas después de que Tamara Falcó alegara sentir "pena" hacia el que era su prometido. ¡Dale al PLAY y escucha la reacción completa de Jaime!
Consciente de que no había marcha atrás, Tamara Falcó cortaba todo tipo de vínculo con la familia del empresario, con quien mantenía muy buena relación. No solo cambiaba de teléfono móvil sino que también les dejaba de seguir en redes sociales: "No quiere que ninguno de ellos tenga contacto con ella ni con su círculo para no hacer más daño", contaba José Antonio Avilés. Sea como fuere, lo que es evidente es que la marquesa de Griñón no quiere saber absolutamente nada de su exnovio ni de todo lo que tenga que ver con él.