No se habla de otra cosa desde que el pasado viernes saliera a la luz un vídeo en el que Íñigo Onieva se besaba con otra mujer que no era Tamara Falcó durante su asistencia en el festival Burning Man. Una traición que tenía más importancia si cabe teniendo en cuenta que apenas 24 horas antes, la marquesa de Griñón había anunciado con entusiasmo su compromiso. Pero, ¿cómo llegó el vídeo a la protagonista?

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Tal y como ha revelado Daniel Carande en 'Es la mañana de Federico', Tamara Falcó pudo ver el polémico vídeo mucho antes de que se filtrara a los medios de comunicación. Al parecer, la pareja estaba practicando deporte a primera hora de la mañana cuando se percató que habían hackeado su móvil. De un momento a otro el vídeo se encontraba en todos los estados de WhatsApp de su agenda de contactos. "Yo lo pude ver", admitía el comunicador antes de que la hija de Isabel Preysler reseteara el dispositivo. El objetivo no era otro que desenmascarar a Íñigo Onieva.

Tamara Falcó
Instagram @tamara_falco

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La gran mentira de Íñigo Onieva

Cuando Tamara Falcó le pidió explicaciones a su prometido este le contó que se trataban de unas imágenes que pertenecían a 2019, una mentira que caía por su propio peso solo unas horas después y que provocaba la ruptura de su relación. Íñigo Onieva asumía sus actos "inaceptables" y pedía perdón públicamente a Tamara y toda su familia no sin antes dejar claro que su amor por la marquesa de Griñón está intacto: "Estoy absolutamente arrepentido y destrozado (...) Estoy completamente enamorado y es la mujer de mi vida por lo que me duele enormemente haberla hecho daño", decía.

La decepción ha sido tal que Tamara Falcó no quiere ni oír hablar de Íñigo. Se refugiaba en casa de Isabel Preysler y desde allí le daba un ultimátum para que sacara las cosas de su casa cuanto antes. "Él tiene esperanzas de que la historia se arregle, está convencido de que se va a arreglar", revelaba el periodista Antonio Rossi después de hablar con su entorno más íntimo. Por lo pronto, ha sido su madre, Carolina Molas, quien admitía el mal momento que están atravesando.