Rocío Flores ha cruzado el puente de las emociones y, era de esperar, se ha roto. El distanciamiento con su madre ya le pesa demasiado y siente que tiene muchas cosas por las que pedir perdón. A su padre y, sobre todo, a su hermano David. Rocío tiene muchos sentimientos que le queman dentro y en el puente los ha soltado. Por supuesto ha hablado de su conflicto con su madre, a la que, una vez más, ha vuelto a tender la mano.

"Tantos años sin tener relación con ella, el fracaso absoluto en cada intento... El ver la relación que puede tener mi padre con su madre, mis amigas con sus madres, es muy doloroso, el tiempo se ha ido y el tiempo no vuelve", ha dicho Rocío en la que, sin duda, ha sido la reflexión en voz alta más dolorosa de su distanciamiento con su madre, Rocío Carrasco.

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Rocío Flores y Rocío Carrasco

La hija de Antonio David Flores ha hecho muchos llamamientos a su madre durante su estancia en Honduras. La joven, quizás, vio la isla como un puente a un acercamiento con su progenitora pero esta no ha reaccionado, al menos de forma pública. "Tener un problema y saber que tienes a tu padre pero no a la otra parte... Puedo dar gracias de tener a Olga, que es como si fuera mi segunda madre. Pero siempre falta", ha dicho la nieta de Rocío Jurado sin parar de llorar. Rocío Flores Carrasco, sin dar nombres, ha vuelto a señalar a la pareja de su madre, Fidel Albiac, como posible culpable de que ambas estén separadas.

"No quiero hace daño, estoy cansada de guerra, quiero tranquilidad y que las cosas se solucionen. Llevo muchas cosas dentro", ha expresado Rocío, absolutamente rota y visiblemente cansada, y ha compartido sincera: "La echo de menos y la echa de menos mi hermano". Rocío ha insistido en que ella no se culpabiliza ni siente la necesidad de "pedir perdón por un hecho en concreto". "He intentado dar todo por mi familia y mirar por el bien de todos, es tan sencillo como levantar el teléfono. No quiero que nadie se sienta ofendido, estoy en un punto que ya me pesa mucho", ha contado la joven.

Rocío Flores ha asegurado que no tiene "que perdonar a nadie". "Somos mayores, sabemos lo que hacemos, no es el te tengo que perdonar por no estar es más bien echo de menos que no estés", ha dicho muy sincera.