Por primera vez Rumer no era la ‘hija de', ni actuaba de comparsa de nadie. Por fin ella era la protagonista. Algo que siempre deseó, pero que tanto le ha costado. Su gran noche tuvo lugar ayer, durante la final de ‘Dancing with the stars’, el ‘Mira quién baila’ americano. La actriz había luchado muy duro para convertirse en una de las finalistas, y el público se puso de su lado. La hija de Demi Moore y Bruce Willis se coronaba como la mejor bailarina de esta edición del show y lo hacía arropada por todos los suyos.

 

Su paso por el programa de baile ha estado lleno de buenos momentos. Gracias a esta aparición semanal, muchos han podido conocerla mejor y sentir empatía con ella. A todos se nos rompió un poquito el corazón cuando dijo que había sido muy duro crecer teniendo a su madre como referente, ya que todo el mundo comparaba sus físicos y esto la hacía sentir terriblemente mal consigo misma. Además, y por si esto no era suficiente, la adolescencia de Rumer sólo consiguió empeorar cuando Demi empezó a salir con su amor platónico, Ashton Kutcher. Aún así, de aquellos días Willis guarda unos bonitos recuerdos ya que el de ‘Jobs’ se portó muy bien con ella y con sus hermanas.

 

Rumer sabe que parte de su éxito se lo debe a Valentín, su pareja de baile durante estas semanas con la que ha compartido actuaciones y horas de duro trabajo. “@imvalc las palabras no pueden describir la gratitud, amor y aprecio que siento por ti y por este increíble viaje que hemos realizado durante los últimos 3 meses. Gracias por tu coraje, tu apoyo, amistad, lealtad, humor, pasión y por haber creído en mí de manera incondicional, no sólo como persona, sino también como bailarina”. Rumer reconoce que este tiempo en el talent show la ha cambiado y cree que ha sido la experiencia más maravillosa que ha vivido.

 

Igual que ella está orgullosa de su progreso y de su capacidad de superación, también lo está su familia. Sus hermanas han sido un fuerte apoyo para esta actriz de ‘Sensación de Vivir, la nueva generación’, al igual que sus padres. Las visitas de Demi al plató han sido constantes, sabiendo lo que estas significaban para su retoño.

 

¡Enhorabuena, Rumer! ¿Dónde colocarás ahora ese premio tan ‘discretito’?