Rocío Flores, cada vez más lejos de la televisión pero más cerca de ser una estrella de Instagram

Rocío Flores no quiere saber nada de colaboraciones como tertuliana ni como defensora. Otros matarían por comentar desde el sofá de Mediaset los programas de la cadena, como por ejemplo, ‘La isla de las tentaciones’, formato del que es fan total, pero a ella le basta con ver el programa desde la comodidad de su casa y abrazada a su chico. Tiene clarísimas sus prioridades y salir en la tele no es una de ellas.

Esto no significa que la fama no le haya reportado una nueva manera de ganarse la vida. No quiere tele, pero sí redes sociales. Rocío Flores ha hecho de su Instagram un medio para ganarse la vida. A lo que consiguió en ‘Supervivientes’ (se dijo que era la concursante con el caché más alto de la edición) se le suma lo que mensualmente saca a través de colaboraciones con marcas. 

Su perfil es el escaparate perfecto para marcas de ropa y de belleza, los dos grandes grupos con los que trabaja.

Leggings reductores, ortodoncia invisible que promete dejarle la sonrisa de una Barbie… la nieta de Rocío Jurado está abierta a este tipo de publicidad y las firmas confían en ella porque su condición de famosa que podría ser tu mejor amiga aporta credibilidad a lo que promociona, por lo que sus recomendaciones parecen calar. Se ha convertido en toda una influencer.

Y por si el aluvión de colaboraciones no fuera suficiente, Rocío Flores llega al podio de las influencers con su propio filtro para grabar stories. Ahora ella, como las grandes, Marta López Álamo, Laura Matamoros o Laura Escanes, también tiene su filtrito que te pone buena cara al instante. Que no se diga. Esto, en el mundo IG, es como ganar un premio a toda tu carrera, y la ex superviviente ya dispone de uno. ¿Qué será lo próximo? ¿Su código descuento para esos tés que todas anuncian?