Roberto Leal, el presentador preferido por el público y la crítica: cuáles son las claves de su éxito más allá de 'Pasapalabra'

No sabes cómo, pero Roberto Leal (43 años) es uno más en tu casa. Tu madre lo adora. No es por desmerecerte a ti, pero en su corazón, estáis casi a la par. ¿Qué tiene el andaluz para caer bien a todo el mundo? Gusta su naturalidad, su desparpajo y también su sencillez. El presentador de ‘Pasapalabra’ se ha convertido en el ‘ojito derecho’ de la audiencia, que tarde tras tarde le escoge para pasar el ratito de antes de la cena. Y ahí, antes de las tortillas francesas, el comunicador sevillano se ha ganado un hueco en tu hogar.

El público le adora, pero la crítica, también. Les gusta su manera de reivindicar la televisión con acentos, su profesionalidad y su emotividad. Él es mucho más que un busto parlante. No dispara palabras sin más. No, se implica. Tantos con los concursantes de ‘Pasapalabra’, como con los famosos que visitan el plató. Les hace brillar. Y eso solo puede hacerlo un profesional que sea generoso. Lo aprendió en una buena escuela, como reportero en ‘España Directo’ y, de ahí, al estrellato. 

Es el niño bonito de tu casa y también de las cadenas que le escogen. El punto fuerte de Roberto Leal es su don de gentes y ese carisma que le hizo sobresalir pronto. Tras unos años en ‘España Directo’, y aupado como el reportero preferido, dio el salto a Antena 3 para convertirse en presentador. El cambio de cadena trajo consigo mucho más que nuevos compañeros. También le trajo amor. El periodista se enamoró de otra comunicadora Sara Rubio con la que ha formado el proyecto que le hace sentir más orgulloso, su familia. 

Artículo recomendado

Isabel Preysler y Carolina Molas, unidas, dan un paso atrás a horas de la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva

Mujer, hijos y perrita, así es la familia de Roberto Leal

Primero vino su perrita Pepa, la chihuahua que le enseñó lo que era tener alguien a su cargo, a preocuparse por otro ser vivo. La mascota es mucho más que un animal tanto para Sara como para Roberto, que la sienten casi como una hija más. Y, a los años, llegó Lola, que puso patas arriba su vida.  Él había vuelto a TVE convertido en una de las grandes estrellas de la cadena pública. Presentaba el programa que había supuesto su salto a la fama y, en 2017, la cadena le hacía la oferta de ser el nuevo presentador de ‘Operación Triunfo’. Acababa de ser padre y el programa se emitía desde Barcelona, además, no renunciaba al diario de ‘España Directo’. Fue difícil, en ocasiones, casi imposible. Pero lo consiguió. 

Era su época de mayor éxito profesional. El presentador de moda, y él hacía auténticos malabares para no solo triunfar en su carrera, sino también en su vida personal; su gran pilar. Multiplicó sus esfuerzos y hacer piña con su mujer se convirtió en oxígeno para su familia. Si se lo proponían, podrían salir adelante en este ritmo endiabladamente loco. Pero, de repente, lo que no estaba en sus planes. El adiós de su padre. 

Una durísima pérdida y una oferta laboral a su madre

Cuando apenas quedaban unos días para que lograra uno de los grandes hitos de su carrera, presentar las Campanadas desde la Puerta del Sol, ocurrió lo nadie quería. Su padre fallecía. Su familia se quedaba completamente destrozada tras la muerte del patriarca de los Leal, y él, tan cercano a sus progenitores, no podía permitirse venirse abajo. Cumplió con su cometido en la cadena pública y lloró su pérdida junto a su madre, a la que ha convertido en su nueva musa. “Te queremos papá. Aquí seguimos tus hijos, nietos y mujer soplando velas por ti. No sabes lo que te echamos de menos, calvito”, escribía hace unos meses, en el que habría sido su cumpleaños. 

Y, precisamente por este halo de hijo genial que emana, no es de extrañar que, en su peor momento, le ofreciera a su madre un proyecto que la ilusionara y mantuviera en activo. Roberto Leal y Sara Rubio tienen una productora que se encarga de algunos espacios para Atresmedia o Telemadrid, y, desde hace algún tiempo, cuentan con Mercedes Guillén como estrella. Tras trabajar juntos en algunos espacios,  Leal volverá a compartir proyecto con su progenitora. Será ‘Casafantasmas’, en Flooxer, con un contenido muy atractivo; en que la ex costurera se convertirá en investigadora paranormal. 

Pero no se detiene ahí. Estas Navidades nos acompañó para despedir el año, junto a Eva González, llenando de humor la última noche del año. Quizás el ‘efecto Roberto Leal’ obedezca a algo muy básico: es buena gente. Cualquiera que le vea en televisión o en sus redes sociales querría ser amigo suyo; y, la manera de tener la racioncita diaria de él es sintonizando Antena 3. 'Pasapalabra' es un formato de éxito, claro, pero Leal es mucho más que un gran comunicador. Es, sencillamente, un buen tío.