Nueva aspirante al corazón de Cristiano Ronaldo, Paula Suárez

5 de julio de 2016, 13:31

Desde que lo dejó con Irina Shayk, Cristiano Ronaldo es un verdadero ‘tronista’. Y no lo decimos solo por su apariencia, sino por la cohorte de pretendientas con la que se lo ha relacionado desde entonces, todas ellas ávidas de conseguir un huequito en el corazón del futbolista.

Pero, de momento, Ronaldo hace suyo el tema de ‘Living la vida loca’ y exprime cada segundo alejado de los campos juego de la mejor manera que sabe: de fiesta. La última tuvo lugar en Ibiza (parece que la temporada de yates ya ha quedado inaugurada), en donde se le vio muy pendiente de una escultural morenaza. Esta vez podría haber preferido la calidad Made in Colombia, y estar suspirando por Paula Suárez mientras se prepara para Eurocopa.

Paula es una joven que se define con esta frase en su Instagram: “¡El mundo es mi mente!”. Debe de ser híper profundo pues no entendemos demasiado del enunciado, pero seguro que es culpa nuestra. Paula, además de tener el mundo enterito en su cabeza, es modelo, actriz y vive a caballo entre España, Reino Unido y Estados Unidos. Con tantos países en retortero, ya empezamos a entender la frase que la define…Pero ella es natural de Bogotá, lo que sucede es que su trabajo la hace viajar mucho.

Y entre viaje y viaje coincidió en Ibiza con Cristiano donde salió a navegar con él y con un grupo de amigos. Se pasaron tonteando toda la jornada, entre sensuales bailes en la cubierta del yate. A juzgar por sus movimientos se compenetraban estupendamente. Así que las alarmas acerca del comienzo de un nuevo romance se dispararon.

Comparte algunos rasgos con Irina, como la melena larga oscura, los labios carnosos y un vientre que no ha visto más grase que la del aguacate que se desayuna cada mañana. A diferencia de Irina, Paula todavía no es una top, aunque en redes sociales parece tener un gran apoyo. Solo en Instagram la siguen casi 350.000 personas.

¿Es esta instamoldel la nueva inquilina del corazón de Cristiano Ronaldo? Solo el tiempo y las fiestas lo dirán.