La inesperada ruptura de Jessica Bueno y Jota Peleteiro después de más de una década juntos y dos hijos en común ha llevado a la modelo a la primera línea de actualidad (con permiso de Alba Carrillo y Jorge Pérez). Nos tenemos que remontar al año 2009 para recordar como una jovencísima Jessica probó suerte en el mítico concurso Miss España representado a Sevilla y alcanzando el cuarto puesto gracias a su clase y su belleza innata.
"Lo malo es que a veces soy frágil hasta límites insospechados, pero lo bueno… lo bueno es que cuando soy fuerte, mi fortaleza no tiene límites", así se define Jessica así misma en redes sociales. Aunque apenas cuenta con 32 años, la modelo tiene una importante trayectoria si hablamos de popularidad. Durante años, la sevillana ha combinado su faceta como maniquí con la formación, tiene estudios en Comercio y Marketing y más tarde los completó con un Grado en Protocolo y Organización de Eventos que realizó a distancia mientras residía en Reino Unido.
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Jessica Bueno se encuentra en una encrucijada tras su separación de Jota Peleteiro
Su pasado amoroso
Pocos recuerdan que por aquel entonces Jessica Bueno mantenía un noviazgo con Feliciano López, algo que no se alargó mucho más. Después, dio el salto a la televisión de la mano de 'Supervivientes 2011' donde conoció a Kiko Rivera. Su complicidad traspasó la pantalla pero no fue hasta que ambos salieron del concurso cuando dieron un paso al frente y apostaron por sus sentimientos, una relación de dos años marcada por los altibajos, el anuncio de la boda, un aborto y el nacimiento de su único hijo en común.
La relación de Kiko Rivera y Jessica Bueno ha estado marcada por la polémica. Las cosas entre ellos no fueron demasiado bien y en 2013 anunciaron su ruptura definitiva "de mutuo acuerdo". Desde entonces, la modelo se desmarcaba por completo de las polémicas de la familia Pantoja y optó por recuperar una vida lejos de los medios. Tras varios meses alejada del foco mediático, la joven conoció al futbolista gallego Jota Peleteiro y se enamoraban perdidamente. En 2015 pasaron por el altar en una boda secreta que tuvo lugar en Marbella y un año después daban la bienvenida a su primer hijo, el segundo para ella.
Fue la marcha de Jessica al extranjero siguiendo los pasos de Jota Peleteiro y llevándose consigo a su hijo mayor lo que hacía estallar a Kiko Rivera llevando a la madre de su hijo a los tribunales. Por aquel entonces la relación entre ellos era muy complicada aunque con el paso de los años conseguían alcanzar una cordialidad por el bienestar del pequeño y hace solo un año coincidían en la celebración de la Primera Comunión del pequeño. "Nos llevamos de maravilla", reconocía el Dj hace algo menos de dos años.
Durante los siete años de matrimonio, Jessica ha seguido los pasos de su marido donde fuera necesario. Hace tres años se instalaron de manera definitiva en Bilbao y cumplían un sueño al hacerse con una casa de campo en la que poder vivir rodeados de naturaleza y animales lejos del estrés de la ciudad. Sin embargo, esa aparente vida idílica daba un giro de 180º cuando después de la llegada de su segundo hijo han decidido poner punto y final a su relación.
La mudanza en el aire
Jessica Bueno posee una impresionante casa en El Molar (Sevilla), sin embargo, tras la retirada de Jota Peleteiro de los terrenos de juego decidieron quedarse en Bilbao, una ciudad que ha enamorado a la modelo. Tras su sonada separación las cosas podrían cambiar de manera radical. Aunque Jessica ha cumplido un sueño al construir un hogar en una casa de campo situada a las afueras de la ciudad, en la que poder ver crecer a sus tres hijos rodeados de naturaleza y animales, es una incógnita si Jessica decidirá mudarse a Sevilla para estar más cerca de su familia o bien seguirá como hasta ahora.
Lo que es una realidad es que al menos por el momento, y hasta que los más pequeños terminen el curso, Jessica seguirá viviendo en el País Vasco.