La Mareta, así es el refugio favorito de verano de Pedro Sánchez y su familia

Hace apenas unas semanas, el pasado 23 de julio, fueron las elecciones generales. Aún con la intensidad de esa jornada a flor de piel y la resaca emocional por los resultados, Pedro Sánchez ha inaugurado sus vacaciones de verano. El líder socialista disfrutará de quince días de desconexión para cargar las pilas y volver con fuerza para lograr unos acuerdos que le permitan formar un nuevo Gobierno. ¿Y a dónde irá? Te lo contamos.

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Pues el presidente del Gobierno (en funciones) se desplazará a La Mareta, un increíble palacio en Lanzarote que cuenta con todos los lujos y comodidades. Sánchez lleva veraneando ahí desde 2018, año de la moción de censura a Mariano Rajoy. Pedro llegaría, junto a su mujer, Begoña Gómez, y sus dos hijas, Carlota y Ainhoa, a principios de la próxima semana, según recoge Vanitatis.

Begoña Gómez y Pedro Sánchez.

¿Cómo es este emplazamiento para que Pedro Sánchez haya vuelto cada verano sin falta? Con una superficie de 10.000 metros cuadrados, este palacio está compuesto por diez bungalows, en los que además de la familia es más que probable que se alojen el resto de la delegación, tanto de servicio como de seguridad. El edificio principal está equipado con dos dormitorios, cada uno de ellos con terraza privada, dos cuartos de baño, salón y zonas de descanso.

En cuánto al exterior, la propiedad tiene piscina privada, canchas deportivas y jardines de arena volcánica en los que se puede apreciar la vegetación típica de la isla. Y por si fuera poco, también hay un helipuerto y un camino que accede directamente a la playa.

La Mareta, el refugio de ensueño y con historia de Pedro Sánchez

Parte del Patrimonio Nacional, hace años fue una casa al borde del mar que el artista César Manrique se encargó de remodelar, siguiendo el estilo de la arquitectura local: de escasa altura, fachada blanca y ventanas y puertas verdes. Eso sí, su historia se remonta un poco más atrás, a los años 70, cuando el rey Hussein de Jordania decidió construirla y, en 1989, la cedió al rey emérito Juan Carlos (85 años). En 2015, el rey Felipe VI (55 años) escogió cederlo para intereses turísticos.

Pedro Sánchez no ha sido el único en utilizar este palacio como lugar de vacaciones. Otros presidentes del Gobierno antes que él, como José Luís Rodríguez Zapatero o José María Aznar, pasaron días de distensión y tranquilidad en él. También figuras históricas e internacionales como Helmut Kohl, excanciller alemán, o Mijaíl Gorbachov, expresidente soviético. 

Incluso la familia real llegó a utilizarlo, en verano e invierno, como centro de reunión familiar. Fue allí donde murió doña María de las Mercedes de Borbón y Orleans, la madre del rey emérito.

El lado familiar de Pedro Sánchez: su mujer Begoña Gómez, sus dos hijas 

La vida privada de Pedro Sánchez está marcada por su matrimonio con Begoña Gómez, por las hijas que tienen en común y por las aficiones que intenta llevar a cabo cuando su trabajo se lo permite. Begoña Gómez siempre ha sido el mejor apoyo de Pedro Sánchez. Desde que llegó a la presidencia, al candidato del PSOE no le ha faltado la lealtad de la mujer con la que comparte su vida desde hace más de 20 años. 

Begoña Gómez y Pedro Sánchez.

Fue en una fiesta donde se conocieron y, tal y como han comentado en alguna ocasión, lo que sintieron fue un flechazo. Al poco tiempo, se fueron a vivir juntos al piso en el que ella vivía en Madrid. “Fui yo quién puse el cepillo de dientes en su casa, ella tenía un piso montado mucho más grande que el mío”, comentó Pedro Sánchez en una entrevista que concedió hace un tiempo a Bertín Osborne.

En el año 2006, Pedro Sánchez y Begoña Gómez se casaron en una boda civil. Pero sin duda, los días más importantes de sus vidas llegaron con el nacimiento de las dos hijas que tienen en común. El presidente del Gobierno y su mujer, son padres de dos adolescentes a las que siempre han mantenido al margen de toda la vida pública y a las que Pedro les dedica todo el tiempo que su cargo le permite.

Y no se puede hablar de la vida familiar de Pedro Sánchez sin hacer mención al baloncesto. El presidente del Gobierno tiene en este deporte su gran pasión, e incluso se dedicó a ella de forma profesional. Jugó en el Club Estudiantes hasta que cumplió 21 años, cuando decidió centrarse en sus estudios. Hasta entonces, ocupó la posición de alero, gracias en parte a que mide 1,90m. Tanto le apasiona, que no ha dudado en inculcarles este deporte a sus hijas.