Luz Casal, desolada por la muerte de su madre

Luz Casal acaba de recibir uno de los más grandes mazazos de su vida. Su madre, Matilde Paz Blanco, falleció en Avilés, Asturias, a los 86 años.

Luz es la única hija del matrimonio formado por José Casal y Matilde Paz, motivo por el cual siempre estuvo muy unida a sus padres. Uno de sus temas más destacados, 'Entre mis recuerdos', le recuerda a su padre, fallecido a finales de los años 90. Tras su muerte, Luz estuvo cuatro años sin grabar un disco.

En el tanatorio, una desolada Luz Casal afirmaba: "Llevaba un tiempo enferma, estoy destrozada". Matilde Paz estaba ingresada en el hospital San Agustín de Avilés, donde desgraciadamente todos temían el fatal desenlace. Los restos mortales serán trasladados a Naveces, donde se encuentra la residencia familiar, y su funeral será oficiado en la parroquia de San Román. Posteriormente, será enterrada en el panteón de la familia.

Luz confesó hace pocas semanas a Toñi Moreno que le costaba muchod decir 'te quiero' a alguien. Tampoco es una mujer de lágrima fácil, aunque reconoce que se emociona con facilidad. La muerte de su madre ha sido un golpe durísimo. "Estoy bastante mal", atinó a decir en el tanatorio, visiblemente emocionada.

Luz Casal nació en Boimorto, A Coruña, pero se mudó con sus padres a Asturias cuando apenas tenía seis meses de edad. La cantante se crió en Gijón, ciudad en la que dio sus primeros pasos en el mundo de la música. En el pueblo en el que vivían todos querían a Matilde. "Siempre fue una mujer muy trabajadora y fuerte. Era muy querida, destacaba por su carácter. Aunque estaba malina tenía muy buena presencia siempre", explicaron algunos vecinos de la fallecida al periódico El Comercio.

El fallecimiento de sus padres no ha sido la única adversidad por la que Luz ha atravesado en su vida. El cáncer fue otro difícil momento. La cantante gallega ha tenido que hacer frente al cáncer de mama dos veces a lo largo de su vida, y desde entonces es una de las figuras públicas más volcadas con el tema. Fue en 2007 cuando Casal le plantó cara por primera vez, y fue en 2011 cuando este ‘incómodo’ conocido se volvió a cruzar en su vida. Las dos veces lo hizo de la misma manera, sin perder la ilusión y sabiendo que había una luz al final de ese oscuro túnel. "Hay ciertos días ingratos, dolorosos, que son como días sin vida, pero también hay otros que te pueden permitir equilibrarlo con ánimo", contó Luz en una rueda de prensa, detallando cómo había sido esa segunda vez frente a la enfermedad.