Jorge Javier Vázquez pone en venta su impresionante casa de Madrid

El presentador, que el viernes se sienta con Bertín Osborne, ha puesto en venta su casa de Madrid...

1 /13
1 / 13
2 / 13
3 / 13
4 / 13
5 / 13
6 / 13
7 / 13
8 / 13
9 / 13
10 / 13
11 / 13
12 / 13
13 / 13

Lo ha repetido en numerosas ocasiones. Jorge Javier aprovecha que el viernes se sienta con Bertín Osborne para anunciar que tiene su casa en venta. El presentador quiere deshacerse del chalet en el que reside a las afueras de Madrid y en el que ha pasado algunos de los mejores momentos de su vida. De hecho, allí es donde recibirá al conductor de 'Mi casa es la tuya' tras haberse recuperado con gran éxito del ictus que sufrió. Mientras tanto, nos colamos en el interior de esta increíble propiedad...

Artículo recomendado

'Sálvame' cumple diez años: El mensaje de Jorge Javier en el décimo aniversario del programa

Jorge Javier

La casa de la que se despide Jorge es un precioso chalet ubicado en una de las urbanizaciones que más intimidad ofrecen a sus vecinos, algo que él valora por encima de todo. Esta vivienda, en la que ha pasado los últimos años de su vida, donde ha ensayado canciones, obras de teatro y guiones de televisión, queda a la venta para que todo aquel que así lo quiera pueda seguir llenando sus más de dos mil metros cuadrados de recuerdos. Él ya le ha entregado una buena cantidad.

Se trata de una construcción de tres plantas, aunque la primera de ellas es una baja sobre rasante. Toda la vivienda está impregnada por el gusto del presentador por el mundo del showbussines hollywoodiense, los musicales y su época de mayor esplendor, los años 20 y 30, con esos característicos toques art-decó en la decoración.

Pero la verdadera joya de la casa no hay que buscarla en su interior, sino fuera. Dispone de dos mil metros cuadrados de fabuloso jardín. Incluye una piscina, perfecta para cuando el calor se termine de asomar a los termómetros y un bonito porche desde donde darse a la lectura (¡cuántas novelas no se habrá leído Jorge en estas tumbonas!) o cenar al canto de los grillos y las cigarras. Olvidándose, por unos minutos, de la locura que supone vivir en Madrid.

Loading...