El estado de salud de Jordi González ha ocupado el centro del foco mediático desde hace meses. El presentador desapareció de la noche a la mañana de 'D Corazón', lo cual hizo que muchos pensaran que estaba de vacaciones. Y era cierto. Pero su demora en volver se debía a un motivo mucho más grave. "Estoy malito. Después de quince días de vacaciones, he cogido un trancazo. Estoy con dolor de espalda, dolor en la garganta, fiebre…", decía González a su compañera Anne Igartiburu en el aniversario del programa.
Sin embargo, era algo más que una gripe normal. "Me marché de vacaciones en enero a Colombia. Y lo que me paso me podría haber pasado en cualquier otro sitio porque una bacteria me atacó", explicaba en 'Tot es mou' de TV3. "Esta bacteria me provocó una cosa muy jodida, una bineumonia lateral, que es de lo que murió el Papa, agravada por una crisis renal. Un desastre", explicaba. Una información que ya explicó a Pilar Eyre, bloguera de la revista Lecturas.
En esa entrevista, Jordi anunciaba que volvería al trabajo en septiembre. Sin embargo, el presentador ha concedido una entrevista a 'Col·lapse', otro programa de TV3. González ya había estado en este espacio hace tres años durante su inauguración. Fue el primer invitado que se sentó en su plató y ahora ha decidido que fuera el primer lugar donde ha concedido una entrevista completa.
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Ricard Ustrell, presentador del programa, ha querido saber cómo está siendo la vuelta a la realidad. "Estoy bien", ha asegurado. Justo después, Jordi explicaba en más profundidad cómo empezó a notar esta enfermedad. "Salí de casa por la mañana, y al volver a mi apartamento me costaba respirar. Me faltaba el aire. Me senté en un jardín y no podía respirar", ha narrado.
Al parecer, "una bacteria que había en el ambiente" se introdujo en su organismo y empezó a dañarle desde dentro. "Vino el médico a casa, me tomó la temperatura, oxígeno en la sangre. Me dejaron ingresado y ya no recuerdo nada más hasta muchas semanas después", relataba. Más tarde, gracias a las personas que le acompañaron, pudo saber que estuvo 6 semanas ingresado, 3 de ellas en la UCI.
Su situación era grave: tuvieron que inducirle el coma porque la fiebre no bajaba de 40 grados y tenía la presión arterial por el suelo. Durante varios días, todo apuntaba al peor de los escenarios. Incluso llegaron a proponer que se llamara a su familia para despedirse.
Las secuelas de Jordi González
Aunque el equipo médico de ese hospital le salvó la vida, ha sufrido varias secuelas. Perdida de peso, una cicatriz por la traqueotomía, problemas de movilidad y un aprendizaje para volver a hablar. "La traqueotomía toca las cuerdas vocales. Yo pensaba: 'Hostias, ¿y si no puedo volver a hablar?", ha expresado el presentador.
"Sin poder hablar, con cinco sondas en el cuerpo, tres semanas inducido en coma: un desastre, así empecé en el 2025”, ha resumido. De hecho, cuando despertó no se podía creer lo mucho que había avanzado el año. "Yo recuerdo que me encontré mal un jueves, y una enfermera me dice que es sábado y yo le pregunto si solo he pasado dos días en el hospital", ha destacado. Ella me dice: ‘No, llevas casi dos meses’. En ese momento fue cuando fui consciente de que estaba muy mal”, ha explicado en 'Col·lapse'.
A pesar de todo ello, el apoyo y cariño de sus familiares y amigos ha sido esencial para su recuperación. "Mi familia estaba semienterados de todo. Gente de mi familia se estará enterando en este programa de que he estado tres semanas más allá que aquí"", ha dicho.
Luis Pliego sobre Jordi González
Después de salir a la luz la enfermedad de Jordi González, Luis Pliego se puso en contacto con el presentador. Una conversación en la que pudo detectar cómo era su estado actual. "Lo que puedo aportar es que tanto Jorge Borrajo como yo trabajamos con él en un programa, en vacaciones de Navidad desapreció y ya no volvió. Preguntábamos y sabíamos que había tenido un problema", explicó el periodista.
"Han pasado cinco meses. Esta mañana nos hemos chateado y me ha dicho que es la dieta mas extrema que ha hecho", contaba Pliego antes de seguir contando esa conversación: "Me ha dicho: 'Se me ha ido las manos. Traqueo y tomia ha sido la mas extrema que he hecho'". Una broma que refleja "ese sentido del humor tan ácido" y que Jordi se encuentra lo suficientemente bien para mirar a este grave bache desde la calma.