Isabel Pantoja regresó a prisión este mismo lunes 24 de agosto tras un segundo permiso penitenciario que se alargó 20 días debido a unos problemas de salud de la cantante, que se vio obligada a ingresar en un hospital de Sevilla por sus problemas renales. Con este panorama y sabiendo que la calidad de vida que tiene en la cárcel ha sido uno de los principales motivos que han generado sus dolencias de riñón, Isabel Pantoja se sigue aferrando a la idea de no completar la condena que le fue dictaminada en su día por blanqueo de dinero.
Tal es su convicción en querer recortar al máximo los plazos de la sentencia, que la tonadillera, aconsejada por sus abogados, ha solicitado por segunda vez la suspensión de la pena de cárcel. Concretamente ha sido su abogado Esteban Romero quién ha presentado un escrito ante la sección segunda de la Audiencia de Málaga alegando que el hecho de que la tonadillera no esté en la cárcel "no significa que vaya a cometer un delito" y reiterando "la voluntad de su cliente para pagar la multa de más de un millón de euros". La defensa de la cantante alude a que Isabel cumple todos los requisitos necesarios para la cancelación de una sentencia: no tener antecedentes penales, que la condena no supere en ningún caso los dos años como máximo, y también una predisposición por parte de la implicada en abonar las indemnizaciones previstas en la pena de cárcel.
Es la segunda vez que la cantante intenta eludir la prisión a través de la solicitud de la suspensión, la primera de ellas fue antes de su ingreso en la cárcel, pero su recurso fue desestimado por un juez que consideró que cumplir la sentencia sería una medida "ejemplarizante". Se espera que en la próxima semana el juez resuelva la situación de una Isabel que ha encajado muy mal su regreso al centro penitenciario, tanto que se especula que está desestimando los consejos alimentícios y de descanso que le dieron los médicos para tratar sus problemas de riñón.