El incuestionable papel de Ana Boyer en la separación de Tamara Falcó e Íñigo Onieva

"Tamara confiaba en él y nosotras también", cuánta información en una sola frase. Ana Boyer se mostró correcta, discreta en sus respuestas y no dio información que pudiera dejar en evidencia ni a Tamara Falcó ni a Isabel Preysler. Sin duda, aunque pudieran haber suspicacias alrededor de Íñigo Onieva dentro del clan, como se ha sabido después, se guardaron cualquier comentario que pudiera sembrar las dudas y apoyaron a la marquesa de Griñón, como lo están haciendo después de su ruptura. El motivo es tan claro como evidente: "Todos queremos que encuentre la felicidad y si ella es feliz, nosotros también". Poco más hay que añadir ante una lógica tan aplastante que las ha llevado a no inmiscuirse más de lo necesario y han dejado que las circunstancias hicieran actuar a Tamara. En la misma línea, ha negado que haya hablado con su ya 'excuñado', pues este asunto concreto, "es algo que tiene que quedar entre ellos", admite.

Nos tenemos que remontar al pasado sábado, 24 horas después de la filtración del polémico vídeo, cuando Tamara Falcó decidía abandonar el piso que compartía con Íñigo Onieva y se refugiaba del huracán mediático en casa de su madre. Completamente abatida no solo por la infidelidad sino por la mentira, en un primer momento solo encontró consuelo en los brazos de Isabel Preysler pero rápidamente Villa Meona acogió un cónclave de las personas más cercanas a la marquesa de Griñón que han tenido un papel fundamental en la separación.

Una de las personas que más tiempo ha pasado al lado de Tamara en estos últimos días ha sido su hermana Ana Boyer. La joven, consciente del mal momento que estaba atravesando Tamara con la traición del que era su prometido, no lo dudaba dos veces y cogía el primer vuelo rumbo a Madrid procedente de Sofía (Bulgaría) donde se encontraba junto a Fernando Verdasco. Cuatro horas de viaje que hizo en compañía de sus dos hijos y que tenía como único objetivo dar un abrazo a su hermana y animarla dentro de lo posible.

Aunque a diferencia de su madre, Ana siempre mostró una buena relación con Íñigo Onieva, la joven no dudó en apoyar a su hermana mayor en su decisión consciente de que al margen de la infidelidad, la mentira había terminado por dinamitar el compromiso.

A Ana Boyer se sumaron su primo Álvaro Castillejo, que era captado por las cámaras a las puertas de la casa de Isabel Preysler, así como algunos de sus amigos más íntimos para los que solo tiene palabras de agradecimiento.

Aunque las circunstancias personales de cada una les han llevado a vivir separadas en los últimos años, Ana Boyer y Tamara Falcó, a quienes separan siete años de edad, tienen un vínculo muy fuerte. Además de hermanas, ambas se consideran mejores amigas y comparten absolutamente todo. 

La mujer de Fernando Verdasco ha acompañado a su hermana mayor en todos los momentos importantes de su vida: lo hizo cuando la marquesa de Griñón estrenó su reality de Netflix, no se perdió ni uno de los programas de 'Masterchef celebrity', la apoyó en su decisión de crear un restaurante en El Rincón y no duda en lucir algunos de los diseños que ha creado Falcó para Pedro del Hierro. Por si esto fuera poco, Ana elegía a Tamara como madrina de su hijo Mateo, un papel muy importante para la marquesa de Griñón y que lleva a rajatabla.