La aparición de Álvaro Muñoz Escassi (51 años) en ‘Supervivientes 2025’ sorprendía a muchos. El jinete ya había participado en el reality con anterioridad pero una lesión lo obligó abandonar siendo uno de los claros favoritos. Ahora regresaba convertido en uno de los hombres más buscados tras la polémica ruptura que protagonizó el verano pasado con María José Suárez. Pero esto ya es cosa del pasado, puesto que ahora demuestra constantemente lo enamorado que está de Sheila Casas (37 años) con todos los mensajes que le envía en directo.
Sin embargo, los gestos que el concursante le dedica lo único que hacen es reforzar esta imagen que quiere dejar atrás por todas las polémicas que ha protagonizado en el pasado. Por su parte, la hermana de Mario Casas se ha mantenido en un discreto segundo plano durante todo el concurso de su pareja. No obstante, hace tan solo unos días pudimos verla a través de un vídeo que llegaba en un momento clave para el participante y que además supuso toda una declaración de intenciones sobre el futuro de su relación.
El silencio de Sheila
Sobre este cambio de rumbo que ha dado la abogada hemos querido hablar con Pau Sabaté, experto en marca personal e imagen, para que analice para la revista Lecturas todo lo que ha significado para ella esta situación. “La presencia de Sheila Casas en los medios ha sido discreta, marcada por la distancia con respecto al foco mediático que suele rodear a las parejas de personajes famosos”, comienza explicando.
No obstante, el experto analiza este silencio que estaba muy cuidado. “Esa elección de mantenerse al margen no ha sido fruto de la casualidad. Hasta hace unos días, Sheila llevaba años construyendo una imagen basada en la privacidad, la reserva y el control de su narrativa”, advierte Sabaté. Sin embargo, su intervención, aunque fuera a través de un vídeo, ponía el foco mediático sobre ella directamente.
De hecho, el experto en imagen tiene claro que este momento “ha sido el primer gran paso fuera de ese silencio”. No obstante, “aunque fue breve y emocional, no fue en absoluto improvisado. El momento elegido, el contenido del mensaje y el formato en el que se presentó indican que fue una intervención cuidadosamente pensada”, revela sobre lo que ha significado esta intervención televisiva.
El momento del cambio
Sheila optaba por desvincularse del concurso de Escassi. Otras parejas han ido acudiendo a los diferentes programas de Telecinco para mostrar su apoyo. Sin embargo, ella no lo ha necesitado, realizando algunos comentarios a través de sus redes sociales. “Esta postura, aunque distante, ayudaba a reforzar la imagen de alguien que prefiere mantenerse al margen de la exposición mediática y que no participa en el juego del reality desde fuera. Era una forma de proteger su relación y su intimidad”, confiesa Pau Sabaté.
En ese famoso vídeo Sheila demostraba el buen momento de su relación. “Te echo muchísimo de menos... Tengo ganas de estar contigo, de reírme, de olerte y abrazarte. Para mí eres el ganador”, expresaba ella provocando el llanto de Álvaro. “El momento fue breve, pero tuvo impacto. Escassi, visiblemente emocionado, lo recibió en un momento de debilidad física, lo que multiplicó la carga emocional del gesto”, señala el experto en imagen.
Para Sabaté este momento en que todo cambió provocó varias cuestiones claras. “La intención de Sheila de intervenir cuando lo considera necesario. No se trató de una aparición casual ni de un impulso romántico. El mensaje, sencillo pero claro, cumplía varios objetivos”, apunta. “Por un lado, reforzaba el vínculo con Escassi en un momento importante del concurso. Por otro, disipaba cualquier rumor de distanciamiento y además, ofrecía al público una imagen de pareja real, sin recurrir a polémicas ni conflictos”, dice sobre sus objetivos claros.
El aviso a Sheila
Tras estas palabras de la hermana del actor, el jinete también se sinceró en pleno directo al confesar que no le importaría volver a ser padre con Sheila. Esto suponía un cambio también para él. “La imagen de ‘galán despreocupado’ dejaba paso a la de un hombre más familiar, centrado en construir algo duradero”, señala el experto en imagen. Pero inevitablemente este giro también afecta a la imagen de Sheila.
“Hasta ahora, había sido vista como una figura discreta, sin mayor exposición. Pero ahora aparece en una narrativa más íntima, como compañera de vida y posible madre futura”, declara Sabaté sobre la discreción de Casas. No obstante, el experto lanza un aviso sobre este cambio de imagen. “Su figura se ha hecho más visible y cercana para el público”, concluye Sabaté tras el análisis realizado sobre esta pareja. No obstante, queda muy poco para la final y en caso de ser Escassi uno de los finalistas, habrá que esperar a ver si Sheila da otro paso más y acude al plató a recibirlo.
