EXCLUSIVA | Sofia Suescun (28 años): "Prefiero que 'Supervivientes' lo ganara una Anita, que la cague una tras otra pero siempre está ahí para el espectador"

La reina de los realities, Sofía Suescun, ha presentado la nueva colección Beachwear de Shein, marca de la que es embajadora desde 2023. La influencer nos ha hablado de sus planes para verano y de cómo está la relación con su madre, Maite Galdeano.

Eres una persona que te cuidas muchísimo, ¿verdad?
-Sí. La verdad que tengo un chef en casa que me lo pone todo muy fácil. Y, en el caso contrario, yo no sería capaz de sentir que tengo que cocinarle a otra persona.

¿Lo has intentado alguna vez?
-Sí, y me cabreo porque soy un poco egoísta. El hambre la tengo yo y no puedo pensar. Tengo ese egoísmo dentro de mí, lo quiero hacer rápido y comérmelo. Kiko se pone a preparar absolutamente todo: desayuno, comida y cena. Yo también estoy en modo espectadora, dándole conversación, que no es poco. Yo no podría pensar que tengo que cocinar para dos, me parece un estrés y un agobio. En casa, lo que hago, es pasar la aspiradora. Kiko cocina y yo limpio.

Kiko ha dicho, no hace mucho, que este será el año de vuestra boda.
-Pues igual... Sí que nos encantaría pasar el resto de nuestra vida juntos, pero no nos hemos puesto serios con esto.

¿Estás esperando que te lo pida?
La verdad que me pone nerviosa la idea de que tenga que venir aquí tu chico a ponerse de rodillas. Lo veo un poco antiguo. Todas estas tradiciones tan antiguas tienen que ir cambiando. Me da un poco de pereza pensar en boda. Nunca he concebido el casarte con el mostrar amor eterno a la persona con la que quieres estar. Es verdad que como fiesta y momento de reunir personas...Es que los lugares con gente, aunque no lo parezca, no sé si tengo algún trauma, me agobian mucho. Incluso me pongo mala, me bajan las defensas. Yo creo que tengo que mirármelo con un especialista. Cualquier sitio con muchísima gente me pone mal.

Entonces, cuando te toca ir a eventos con mucha gente, ¿cómo lo llevas?
-Para mí es un sobreesfuerzo, gasto mucha energía. Es verdad que vivo en un sitio privilegiado donde creo que me nutro de mucha energía y me voy con las pilas cargadas. Llego al lugar y nadie diría que estoy incómoda en ese lugar porque lo disimulo muy bien. Pero estoy gastando un exceso de energía que acaba conmigo. Cuando al final del día me voy a mi casa, me voy hecha un flan y no sé por qué me supone tanto gasto de energía y tanto sobreesfuerzo.

¿Es como una fobia?
-Creo que hay que tratarlo. No es desde el salto a la tele, es desde siempre, desde pequeña. No me gustaba ir a lugares con mucha gente. Es un gasto de energía hacerlo y, si me pilla con las defensas bajas, me pongo mala.

¿Te has planteado dejar de ir a algún sitio en ocasiones?
-Pues sí. He llegado a un momento de mi vida en que voy a lo que me apetece, a lo que siento que me va a aportar algo, a rodearme de gente positiva.

Se ha hablado de varias crisis en tu relación con Kiko y ahí estáis, ¿cuál es el secreto?
-Hoy en día las parejas son supertóxicas. Nosotros somos todo lo contrario, no tenemos nada que ver con eso. Nosotros somos grandes amigos, hermanos gemelos. A veces nos da miedo que estemos pensando lo mismo, nos estamos mimetizando y convirtiendo en la misma persona. Lo que valoro mucho de él es que, en el mundo en que vivimos, hay un montón de egoísmo, de rivalidad, y en este sentido, él me tiene en la cima. Busca darme lo mejor. Se alegra más que yo de las oportunidades laborales que me van llegando.

Se habló de que ibais a hacer un docureality juntos, ¿cómo van esos planes?
-Pues siguen en marcha. La verdad es que hay mucha gente interesada y hay muchas propuestas, estamos decidiendo.

¿En casa hay piques con Kiko para ver quién está más buenorro?
-Hay piques, sí, porque yo no tengo ningún miedo de coger pesos casi tan grandes como los de Kiko. Claro que hay piques, sobre todo cuando yo termino las repeticiones de piernas y él no.

¿Discutís?
-No discutimos. Yo es que no soy de discutir, a mí una discusión me agota. Nosotros nos compenetramos muy bien y formamos muy buen equipo.

¿Y no te da miedo tanta perfección?
-No es perfección, es vivir nuestra vida juntos, de la mano, y compensarnos el uno con el otro. Estamos muy bien, muy tranquilos y enamorados.

¿Cómo están las cosas con tu madre?
-Yo entiendo que esa pregunta siempre la hagáis, pero es que todo sigue igual. Da pena, pero ya está. Al final uno tiene que priorizarse y buscar su felicidad, su tranquilidad y su paz.

Apareció hace poco en televisión diciendo que estaba muy mal. ¿Cómo lo gestionas? ¿Llega un momento en que duele menos?
-Duele lo mismo, al final es algo con lo que hay que vivir y ya está. Tengo que ser consciente de que eso está ahí.

¿No hay posibilidad de reconciliación, entonces?
-Es que ya te digo, al final todo está como antes. Lo que ahora mismo tengo en la cabeza es priorizarme.

Colaboras en ‘Socialité’, ¿te ves dando el salto a presentar el programa?
-Estoy disponible y si alguien quiere que yo le haga el relevo durante unas vacaciones o trabaje como suplente, aquí estoy yo.

Para lo que te has postulado también es para presentar ‘Supervivientes’, ¿debe temblar Laura Madrueño?
-No, no, que no tiemble. La adoro y me parece una chica encantadora. Estuve con ella en ‘Supervivientes All Stars’ y tuvimos muy buen feeling. Yo me siento muy cómoda en Honduras. Con mi experiencia, se me daría bien saber cómo sienten y piensan los concursantes y cómo reaccionan. Yo creo que, en cuanto a ingredientes para cumplir el papel de presentadora allí en Honduras, yo creo que los cumplo. Vamos a esperar un tiempo y a ir aprendiendo todavía un poquito más. ¿Y quién sabe? Hay que soñar en grande y yo sueño a lo grande.

¿Quién es tu ganador?
-Escassi y su cuadrilla no me gustaron desde el principio, creo que él tuvo bastantes errores a la hora de concursar. Prefiero a una Anita, que la cague una tras otra pero siempre está ahí para el espectador.