Tic-tac. En apenas unas horas, Belén Écija, actriz e hija de Belén Rueda, y Jaime Sánchez se darán el 'sí quiero' en una romántica boda en Menorca, la isla en la que han veraneado durante años. Tras seis años de noviazgo, la pareja pondrá el broche de oro a su historia de amor con una celebración a la que acudirán familiares y amigos. El sábado 14 de junio, alrededor de las 17:00h, Belén y Jaime intercambiarán sus votos en la iglesia de Sant Climent y empezaran una nueva etapa juntos.
Pero, antes de esa ceremonia, los novios han querido disfrutar de sus últimas horas antes de ser marido y mujer para festejar con sus amigos. Una preboda espectacular que ha tenido lugar este viernes, pero que empezaba a calentar motores ayer mismo con la llegada de los primeros invitados.
Instagram @belenecijar
En las stories que han subido Belén y Jaime podemos observar como la pareja ha decidido alquilar varias jornadas en unos lujosos yates para poder pasar el rato con sus amigos, como María García de Jaime y Tomás Páramo. Música, aguas cristalinas e ilusión por la próxima boda han convertido estos días en una previa ideal.
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Todo apunta que el plato fuerte tendrá lugar este viernes, en el chiringuito Binidalí Beach Bar Som Sis, situado en la cala Binidalí de apenas 25 metros, tal como recogen medios como 'El Confidencial'. Un enclave idílico que permitirá a sus amigos descubrir los preciosos atardeceres de la isla y acompañar a los novios hasta el mismo momento de su boda.
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La historia de amor de Belén Écija y Jaime Sánchez
La historia de amor de Belén Écija y Jaime Sánchez comenzó hace seis años. Se conocieron por varios amigos en común y, rápidamente, surgió la chispa. Año tras año, la pareja ha cultivado su amor de muchas formas. Una de ellas han sido los viajes. En sus perfiles de Instagram es habitual ver instantáneas de ambos en distintos destinos como Sicilia, Nueva York o Egipto.
El pasado septiembre, Belén compartía con sus seguidores cómo fue su pedida de mano con un tierno vídeo en el que se ve el instante en que Jaime le hizo la esperada pregunta. "En mayo Jaime me leyó la carta más bonita del mundo, que terminaba con una posdata en forma de pregunta que nos uniría para siempre. Se me troncharon las piernas de la emoción al leerlo y me caí de rodillas. Terminé hincando rodilla yo sin querer", explicaba la joven.
"Desde entonces he ido recolectando reacciones de algunas de las personas que más quiero y otras muchas no aparecen aquí porque no he podido grabarlas por los nervios", continúa Belén. Y es que, en el vídeo que acompaña estas palabras, podemos ver a la pareja anunciar su compromiso a familiares y amigos. Entre ellos vemos a Belén Rueda que abraza con cariño a su hija o Daniel Écija, su padre, que abre la boca con total sorpresa antes de acercarse corriendo a la joven.
"Este vídeo me inunda de felicidad, aunque sólo se aprecie en este vídeo un instante de cada uno. Poder compartir la alegría, ver la emoción y la sorpresa en sus caras. Estos momentitos quedan en mi memoria para siempre", explicaba Écija en la publicación antes de terminar con unas palabras para su futuro marido. "Un bonito viaje a tu lado mi amor, mi compañero, mi amigo, mi todo. Celebrémonos. Te quiero mucho. Tengo mucha suerte de disfrutarte todos los día", concluía.
La boda de Belén y Jaime
Como es habitual, no han trascendido demasiados detalles del enlace, ya que la pareja quiere que sea un día repleto de sorpresas para sus invitados. Sin embargo, sí ha habido algunas informaciones que han visto la luz. Por ejemplo, Belén dejó claro en varias declaraciones que no quería hacer una boda convencional porque quería "dejarse llevar". Por ejemplo, no habrá la figura de los padrinos, aunque su padre sí la acompañará al altar.
En cuanto al vestido de novia, uno de los secretos mejor guardados de cualquier boda que se aprecie, se sabe que será de la firma Valenzuela. Los diseños de esta marca son de los favoritos de su madre, Belén Rueda.
"El vestido se va formando poco a poco basándonos en sus ideas, gustos y personalidad. Yo me encargo de reflejar todo lo que ella me transmite en el diseño de su vestido. Se deja asesorar totalmente en cuanto a propuestas que potencian todo lo que ella se imaginaba, se fía totalmente de mí, lo que hacer que sea todo muy fácil", afirmó la diseñadora en una entrevista.
La relación con Belén Rueda
Belén Écija nació siendo famosa. Sus padres, Belén Rueda y Daniel Écija, eran personajes conocidos dentro del panorama cinematográfico. Esta exposición mediática no gustó a la pequeña Belén. Una atención que aumentó exponencialmente a partir de 2004 cuando Rueda encandiló con su papel en 'Mar adentro'. Aunque ya tenía una carrera sólida, su personaje y la historia logró fascinar a los telespectadores.
Este aumento de la fama lo notó Belén en el colegio. La joven, de tan solo 10 años, empezó a ser increpada por tener padres famosos. "De pequeña me hacían preguntas extrañas del trabajo de mis padres. Me daba mucha vergüenza", contaba hace algún tiempo. Además, fue en esa época cuando sus padres se separaron tras 15 años de relación y tres hijas en común. Una de ellas, María, falleció a los pocos meses de nacer.
Una vez superado esta incomodidad, se sumo otro miedo: ser la 'hija de'. Belén decidió dedicarse a la misma profesión que su madre, lo cual provocaba que muchos las compararan. "Lo llevaba muy mal, pero como ahora lo llevo bien lo puedo decir... Llevar los apellidos Écija Rueda, creo que era una cosa más mía. Eso de que tengo que demostrar que valgo, que valgo, que valgo, y simplemente cuando te pones a trabajar, la gente lo ve y ya esta está", declaraba a la revista Lecturas.