Genética u obsesión. Lo cierto es que la extrema delgadez que luce doña Letizia está siempre en cuestión. Muchos son los que opinan que la reina estaría mejor con algunos kilos de más. Sin embargo, ella parece cuidar su dieta y su físico de una manera estricta, lo que descartaría problemas de anorexia, a los que en alguna ocasión se han aludido.
En sus últimas apariciones hemos podido comprobar eso mismo, cómo los brazos de doña Letizia están cada vez más delgados y musculados. Algo que también se puede extrapolar a la zona de la espalda, la que más comentarios levanta cada vez que se la deja al descubierto.
a pérdida de peso desde que subiera al trono han vuelto a encender todas las alarmas, hasta el punto de que algunos medios han calificado el cuerpo de Letizia de filiforme, es decir, con forma de hilo. Y no sólo eso, algunos críticos, ya el pasado año, rechazaban el nombramiento de Letizia como embajadora de FAO, con el argumento de que su delgadez no puede ser referente de una alimentación saludable. Para otros, la herencia genética es el único motivo de su delgadez. Vamos, que es delgada de nacimiento.
La musculatura la ejercita bajo la supervisión de un entrenador personal, y acudiendo a clases de Iyengar, la modalidad de yoga más estricta y exigente que existe. Exigente también es con la alimentación, el pasado 26 de septiembre acudía al congreso Save Food, donde se interesó por la necesidad de etiquetar los alimentos para conocer bien sus valores nutricionales.
Otras son las celebrities, que como Letizia, lucen una preocupante delgadez, como es el caso de Angelina Jolie, que no está atravesando el mejor momento de su vida, tras su separación de Brad Pitt, Victoria Adams o la actriz Tara Reid.