'First Dates': Carlos Sobera se queda sin palabras con el corte del 'niñateo' Xabier

5 de diciembre de 2021, 19:47

Por 'First Dates' han pasado solteros de todo tipo. Clásicos, arriesgados, informales... Algunos de ellos llegaron dispuestos a arrasar con todo, como Xabier. El joven tenía un look diferente, una personalidad arrolladora, (mucha) labia y carisma. Tampoco tuvo pelos en la lengua. En cuanto entró al restaurante de Cuatro dejó a Carlos Sobera descolocado con una contundente respuesta que el presentador tardará en olvidar.

Xabier llegó primero y, tras ser recibido por Carlos Sobera y a petición del presentador, se describió: "Me defino como un travesti bohemio con actitud de niñata. Me gusta un niñateo". Sobera se mostró confuso ante una definición tan curiosa de sí mismo. "Pero, ¿qué es un niñateo?", preguntó el presentador de 'First Dates' sin preveer el zasca que iba a recibir. "No sé, en plan, cositas... cosas de gente joven. No lo vas a entender, Carlos", respondió el soltero.

Carlos Sobera respondió con una carcajada y las camareras gemelas, presentes en ese instante, no pudieron contener la risa ante la contestación del comensal. Al recapacitar su respuesta, Xabier intentó arreglarlo: "Oye no, pobrecito. De gente joven me refiero a Generación Z. Tú eres joven, pero yo más". "¡La madre que me parió!", respondió Sobera. El presentador insistió, quería saber qué era eso de "el niñateo". "Ser niñata es ser una zo*** como soy yo. Me vienen ocho, pues eso, que se vienen. Todos para aquí, que prueben lo que es bueno y que luego en su vida vuelvan a probar algo como yo", respondió Xabier.

Lo siguiente que le confesó a Sobera es que era un entusiasta del perreo. "Me pones Beethoven o Mozart y te lo perreo también, le doy a todo", confesó. El presentador se vio obligado a pedirle que recibiese a su cita así, perreando, pero Julen ya le conocía de su aparición estelar en la televisión vasca. Además, ambos tienen dos cosas muy claras: "que los guapos tendrían que tener más derechos" y que Paris Hilton es su diosa.

Julen acabó encantado; aseguró que le gustaría "hacerlo todas las noches en casa" pero había un 'pero'. En el reservado se besaron como si no hubiera un mañana; sin embargo Julen sintió que estaba besando a una amiga así que le dijo a Xabier que quería hacer un montón de cosas con él excepto tener una cita romántica. Esto, obviamente, no le sentó nada bien y cambió los besos por un apretón de manos. Además, le propuso ir de "safari para que te coman los leones".