Lourdes Montes y Tana Rivera arrasan en El Rocío 2025: El duelo de estilo más flamenco entre lunares, flores y mucho color

Lourdes Montes (41 años) y Tana Rivera (24 años) han vuelto un año más al camino del Rocío, una tradición marcada por la devoción que en los últimos años también se ha convertido en un escaparate de la moda flamenca. Cada año, miles de personas se preparan con entusiasmo para caminar hacia la icónica aldea de El Rocío, en Huelva, luciendo trajes que combinan historia, identidad y mucho estilo.

Atrás quedaron esos vestidos ajustados que veíamos hace unas semanas en la Feria de Sevilla. El Camino requiere prendas cómodas, frescas, una mayor libertad de movimiento pero sin dejar de lado el buen gusto. En estos primeros días de romería Lourdes Montes y Tana Rivera se han alzado como las mejor vestidas. Ya sea con vestidos o conjuntos compuestos por falda y blusa, la diseñadora y la hija de Francisco Rivera han derrochado estilo, alegría y sofisticación. 

Por tradición, las mujeres romeras elegían trajes confeccionados en telas ligeras y cómodas que les permitiera adaptarse al ritmo y la exigencia que requiere el camino. Con el paso de los años y las tendencias, los diseños se han transformado pero sin perder elementos tan característicos como los volantes, los lunares, las flores y los colores vivos. Un look cargado de tradición que se acompaña con mantoncillos bordados, flores en el pelo, pendientes grandes y, por supuesto, calzado cómodo como botas camperas o alpargatas.

Lo bonito de la moda en El Rocío es que va mucho más allá de lo estético. Vestirse de romera tiene un valor simbólico muy fuerte. Es una forma de rendir homenaje a la Virgen del Rocío y de compartir una cultura que se transmite de generación en generación. De hecho, es muy común que los trajes pasen de madres a hijas o que se adapten con pequeños toques personales en cada edición.

Lourdes Montes cambia el vestido de flores por la falda en El Rocío

Lourdes Montes se ha llevado la maleta repleta de opciones. Si hace unos días nos sorprendía con un vestido estampado, que era inspiración para las invitadas más alegres, este jueves transformaba por completo su estilismo para el camino.

Como buena diseñadora de moda flamenca, Lourdes Montes derrochaba estilo con este conjunto en el que la falda de lunares se llevaba todo el protagonismo. Se trata de una prenda a caballo entre la tradición y las tendencias que destaca por su color verde, amarillo, morado y rosa. Una falda muy juvenil, cómoda y favorecedora que aporta dinamismo y frescura.

Sin riesgo, Lourdes combinaba su falda multicolor con una coqueta blusa blanca bordada. Un modelo con mangas asimétricas y un favorecedor escote en V que podrá reutilizar en el día a día tantas veces como quiera. El mantón amarillo con flores bordadas aportaba un toque muy personal y tradicional, al igual que la gran flor fucsia que coronaba su cabeza.

La mujer de Francisco Rivera no ha dejado nada al azar. Cerraba su outfit con las tradicionales medallas, decenas de pulseras y un pequeño bolso de cuero para guardar las cosas más esenciales. Todo el conjunto respeta los códigos de la moda rociera, pero con una elección de colores vivos y una actitud desenfadada que evidencian la alegría y la buena vibra de esta celebración andaluza.

Tana Rivera derrocha estilo con vestido de flores

Muy cerca estaba Tana Rivera. La hija de Francisco Rivera deslumbraba con un precioso vestido estampado de color verde. El corte es entallado hasta la cadera, realzando la silueta, con un favorecedor escote en V que se ensancha en un vuelo amplio con volantes en la parte inferior, lo que le aporta movimiento y confort para las intensas jornadas de camino. Llaman la atención los lazos de terciopelo que le dan ese punto de distinción y las mangas en forma de volante, que le dan ese punto de alegría tan propio del traje de romera. 

Tana Rivera cerraba su look con la tradicional flor, unas botas camperas y un bolso de cuero que llevaba a modo de riñonera.

Aunque hay diseñadores que han introducido detalles más contemporáneos, la esencia sigue siendo la misma: vestir con alegría, respeto y mucho orgullo. En definitiva, el camino del Rocío es una mezcla maravillosa de tradición, fe y estilo, porque cuando se camina hacia la Blanca Paloma, cada volante, cada flor y cada sombrero lleva consigo el alma de Andalucía.