El día que Lecturas presenció la histórica boda Laura Valenzuela: "No reemprenderé mi carrera artística. A José Luis no le gusta que trabaje"

Han sido trece años de noviazgo, pero al fin Laurita Valenzuela ha logrado su ansiada boda. La presentadora y el productor José Luis Dibildos son ya marido y mujer. La pareja se ha dado el “sí, quiero” en la capilla del Parador Nacional de Illescas, el mismo complejo turístico donde Julio Iglesias e Isabel Preysler vivieron su boda, apenas unos meses antes.

Fue una ceremonia semiíntima, con cerca de cien invitados, y muy rápida. Solo se vivió un momento de suspense, cuando el novio tardó unos segundos en responder a la pregunta de: “¿Aceptas a esta mujer como legítima esposa?”. Laurita lo miró asustada durante unos instantes de inquietud e intriga y no pudo evitar echarse a reír cuando al fin su compañero pronunció, con voz firme: “Sí, quiero”.

“He decidido que me mantenga José Luis”

No fue el único despiste de Dibildos. Antes de empezar la ceremonia, se le oyó preguntar si debía acompañar a la novia al altar. Cuando esta empezó a retrasarse –la ceremonia se demoró treinta minutos–, Dibildos alegó que Laura tardaba porque “se está poniendo el velo”, sin caer en la cuenta de que no llevaba.

Laurita se casó con un traje de novia muy rompedor, compuesto por las pieles de setenta y cinco visones blancos procedentes de Canadá. También innovó en el peinado, pues decidió lucir una peluca con flequillo y mechas.

La boda contó con cuatro testigos de lujo: Tony Leblanc, compañero de Laurita en ‘Canción 71’; Antonio Mingote, autor del guion de su película ‘Pierna creciente, falda menguante’; Joaquín Prat, copresentador de su programa más exitoso, ‘Galas del sábado’; y José María Palacios, guionista de ‘Trío de damas’, la película que supuso su debut como actriz.

 

Todos ellos partícipes, en mayor o menor medida, de una carrera que la artista no retomará. Laurita tiene claro que no volverá a ponerse delante de las cámaras. “No reemprenderé mi carrera artística. He decidido que me mantenga José Luis”, declaró la artista. Cuando se le pregunta el motivo, es tajante: “A José Luis no le gusta que trabaje”. Se conoce que el veterano productor ha impuesto esta condición para llevarla al altar. “La verdad es que el noviazgo fue muy largo, pero en ningún momento temí perder a José Luis. Estaba segura de que lo había cazado”, explicó la novia, exultante.

Luna de miel íntima en la Costa del Sol

Tras la ceremonia, la pareja emprendió un viaje a Guadalmina, cerca de Marbella, para pasar su luna de miel. “Solo me llevo un vestido, dos pantalones y dos jerséis. No necesito más porque no pensamos ir a ninguna parte”, explicó Laura con un guiño.

 

“En este viaje me voy a dar la gran vida, sin compromisos sociales”, aseguró. A su regreso a Madrid, le espera una vida consagrada a la familia. “Ahora solo seré un ama de casa. Deseamos tener hijos, quizá cuatro, pero si no vienen no me sentiré ni mucho menos frustrada. Sé que ahora y siempre me sentiré plenamente feliz como mujer y esposa”, garantizó Laura.

Seis meses después nació Lara, su única hija

El 23 de septiembre, seis meses después de su boda con José Luis Dibildos, Laurita Valenzuela dio a luz a su primera hija. La actriz confirmaba así el nombre de su bebé: “Se llama Lara Paula. Lara porque es un nombre que me gusta y Paula porque hay que poner un nombre cristiano”.

La pequeña tuvo una llegada difícil, pues el cordón umbili- cal le produjo una leve asfixia. Llegó al mundo con apenas dos kilos, pero gracias al biberón ya ha engordado 200 gramos. Lara apenas se enteró del par- to. “Primero te sientes gorda y, de repente, te ponen un niño en los brazos. Me durmieron con anestesia a última hora y me encontré con mi hija”, re- memora. “Yo quería un varón, pero ahora me siento muy di- chosa con la nena”, zanja.