"P. es fan de Luz desde que tiene uso de razón"

P. es fan de Luz desde que tiene uso de razón y estaba deseando que la viera actuar en directo para hacerme comprender su devoción. Así que, carretera y manta, el sábado nos plantamos en un pequeño pueblo cercano a los Alpes suizos llamado Thonons Les Bains. Luz actúa en el Théâtre Maurice Novarina, que tiene agotadas las localidades desde hace mucho tiempo. La cantante es una leyenda en Francia y en cuanto hace su aparición en escena se advierte el respeto que le profesan. Silencio absoluto mientras canta, grandes aplausos después de cada tema y al final todo el público puesto en pie reclamando bises. Impresiona verla en directo. Domina el escenario con precisión, interpreta con maestría y utiliza su voz con elegancia, sin aspavientos innecesarios. Taladra el corazón.

Yo no la conozco mucho, sólo de haberla entrevistado en ‘Hay una cosa que te quiero decir’. Pero al ir a saludarla al camerino tras la actuación nos invita a una cerveza y nos pide que nos sentemos para charlar un ratito. De la charla pasamos a compartir con ella la cena que le habían dejado preparada los organizadores en el camerino: pollo asado, roast beef, quesos, sopa de verduras. Descubro a una Luz cálida, inteligente, divertida, cercana, amable, encantadora. Va pasando el tiempo y después de casi dos horas nos tienen que echar del teatro porque lo van a cerrar. Nos hubiéramos quedado más tiempo. Al volver al hotel le digo a P. que estoy muy contento por él. Me alegra que la persona a la que más admira profesionalmente sea también un diez en lo personal.