Jane Fonda (87 años), sobre su rutina deportiva: “Me encanta estar al aire libre en el bosque, sobre todo subiendo y bajando cuestas”

Sus vídeos se convirtieron en una revolución para el fitness femenino y ahora la actriz sigue instando a las mujeres a incluir el ejercicio en sus rutinas

Pilar Larrondo
Pilar Larrondo

Periodista especializada en Moda y Belleza

Jane Fonda
Gtres

Ha desarrollado una labor de activista por la que es probable que la identifique el público más joven, pero Jane Fonda (87 años) fue todo un icono del fitness en los 80. Además de actriz, Fonda desarrolló su faceta de instructora deportiva a principios de los 80, con su primer vídeo de ejercicios Jane Fonda's Workout, inspirado en su libro, Jane Fonda's Workout Book. El deporte casero era un universo a explorar y la actriz se convirtió en pionera de un fenómeno de masas que caló entre el público femenino, aunque reconoce que “en sus comienzos no había una metodología rigurosa de ejercicio para las mujeres”. “Aprendí el entrenamiento básico con una profesora llamada Leni Kasden en los 70”, afirmaba la actriz en una entrevista para la revista People.

Ajena al éxito que cosecharían sus cintas, Jane Fonda se lanzó al universo fitness sentando las bases de lo que sería la actividad deportiva en casa, algo que para muchas mujeres se convirtió en un mantra de liberación. Sobre todo, para aquellas que rondaban los 60 y querían mantenerse activas sin saber muy bien cómo. Aquella actividad, a priori ociosa, se convirtió en una forma de empoderamiento femenino y la actriz siguió explorando por el universo deportivo. Ahora, a sus 87 años, la actriz asegura seguir siendo una amante de la actividad física, aunque adaptada a su capacidad física actual. “Antes era corredora, pero ahora me encanta caminar. Me encanta estar al aire libre en el bosque, sobre todo subiendo y bajando cuestas”, reconocía en esa misma entrevista.

La actriz, que cuyos vídeos se hicieron populares en la era del VHS (algo que para el público más joven suena al Pleistoceno), ha sabido adaptarse a las nuevas tecnologías y ahora colabora con Supernatural, una plataforma de realidad virtual de fitness y bienestar. Adaptarse a las nuevas necesidades y formas de consumo es clave para ella y en esa revolución Jane Fonda conecta el pasado con el presente de manera universal, a través de la música. “Tener la música adecuada puede ser clave para el éxito o el fracaso del entrenamiento, especialmente en cardio y aeróbicos; una lista de reproducción animada, unida a una buena actitud, es esencial", explica. Repasamos algunas de las canciones más icónicas del mundo fitness y las añadimos a las rutinas de ejercicios más adecuadas.

El DVD 'Easy Going Workout', de Jane Fonda.
Jane Fonda Workout

Una lista de reproducción para cada tipo de ejercicio

Si la música en el cine es clave para llevar al espectador al lugar al que quiere transportarlo el director, en el deporte sucede lo mismo. No es lo mismo hacer sentadillas escuchando el Requiem de Mozart, que hacerlo con música electrónica. Por eso, la lista de reproducción escogida, como indica Jane Fonda, es clave para que el entrenamiento tenga éxito. Si eres de las que practica el fitness en casa, estas canciones son las que tienes que añadir a tu playlist.

  • Ejercicios de cardio: El cardio es un tipo de ejercicio de impacto y para el que hay que mantener el ritmo de principio a fin. Por eso, es recomendable apostar por un tipo de música que sea un chute de energía, que nos motive a seguir con la actividad. La electrónica suele ser la favorita en los gimnasios, pero en casa puedes apostar por melodías más poperas (pero no melódicas, sino cañeras) o algún tema de reguetón. Para este último estilo musical, suele haber versiones más electrónicas que le añaden ese punch de energía.
  • Ejercicios de fuerza y pesas: Hay una canción perfecta para este tipo de ejercicios y seguro que se te ha venido a la cabeza nada más leer el enunciado. Sí, hablamos de Eye of the Tiger, de Survivor, el mítico tema de la banda sonora de Rocky. Resulta imposible no venirse arriba levantando pesas con este temazo. Pero conviene alternar sonidos si queremos llegar (o acercarnos, aunque sea) al nivel de musculatura que Sylvester Stallone luce en la película. Algunos de los estilos musicales que mejor le vienen a este tipo de ejercicios son el rock o el metal y otras de las canciones más icónicas para levantar pesas son Believer, de Imagine Dragons y, cómo no, The final countdown, de Europe.
  • Yoga, pilates o estiramientos: Este tipo de ejercicios no sólo contribuyen al bienestar físico, sino también mental, siendo la relajación y el mindfulness una parte clave. Por eso, para esta actividad se recomienda apostar por una lista de reproducción más relajada, como el chill out, los sonidos de la naturaleza o música puramente instrumental. La música clásica es una opción, pero no recomendamos apostar por el Requiem de Mozart.