¿Quiso Toño Sanchís hacerle un ritual de brujería a Belén Esteban?

Habla la exempleada doméstica que demandó a Toño Sanchís y a Lorena, su mujer, y que ahora ha sido demandada por el exrepresentante

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Lucimar Campos es una empleada doméstica que trabajó en la casa que Toño Sanchís y su familia tienen en Villafranca del Pardillo. La mujer trabajó durante dos años sin contrato y por tal motivo denunció al representante en octubre de 2017. La trabajadora y Toño llegaron, meses después, a un acuerdo judicial que le daba la razón a ella, pero ahora ha sido Toño Sanchís quien ha decidido demandarla a ella acusándola de chantaje.

El programa 'Socialité' se puso en contacto con Lucimar, que ha hablado abiertamente, si bien reconoce tener miedo y sentirse impotente ante este ataque de Sanchís. "Yo trabajaba de lunes a sábado, desde las 8 de la mañana hasta las cuatro de la tarde. Muchas veces, hasta las cinco. Y los domingos, si hacía falta, iba también. Me pagaba 600 euros al mes y no tenía papeles", explicó Lucimar.

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Belen Esteban 07

Lucimar comentó que ese odio que sentía Toño por Belén Esteban estaba provocado "por la envidia. Él quería tener todo lo que tenía ella". Y mostró a las cámaras una cuartilla escrita a mano, según la cual Toño quiso hacerle un ritual de brujería a Belén. En ese papel se puede leer, entre otras cosas, "Vela negra jueves 12 mañana 12 noche con las iniciales B.E... Que se calme la fiera que tiene Belén Esteban y que entre la tranquilidad en mi casa".

Está convencida de que la denuncia de Toño "es una venganza por haberle demandado yo". Lucimar, con la voz llorosa, aseguró sentir "miedo, rabia e importencia", pero eso no le va a echar para atrás para volver a demandarlo. "Te tengo rabia, me desesperas. Puedo probar que no te he chantajeado. Ya tengo mis papeles y voy a ir por ti a donde engo que ir. ¡Feliz año!", concluye Lucimar.

La casa en la que trabajó Lucimar se encuentra cerca de Madrid y podría pasar a manos de Belén Esteban si el exrepresentante se declara insolvente y no paga los 600.000 euros que el juez determinó que le ha de pagar a su exrepresentada.

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