¿Por qué celebrar una boda cuando puedes celebrar dos? Si eres el hijo de una princesa y la heredera de una de las mayores fortuna europeas, ¿por qué no? Pierre Casiraghi y Beatriz Borromeo celebraron su enlace civil el pasado fin de semana en Mónaco, pero como ellos son de los de 'a mi me daban dos', volverán a darse el 'sí, quiero', esta vez en una ceremonia religiosa en Islas Borromeo en Italia.

La pareja ha protagonizado una de las bodas del año. Su enlace creó muchísimas expectativas que supieron cumplir con creces. Se casaron a las 11:30 de la mañana en el Palacio de Monte Carlo en una ceremonia presidida por el Príncipe Alberto y su mujer, la princesa Charlene que estuvo oficiada por Philippe Narvino, el ministro de Justicia del principado, el mismo que casó civilmente al Alberto y Charlene.

Fue una ceremonia íntima, a la que 'solo' acudieron 700 invitados y de espíritu informal. Un picnic en uno de los jardines de Palacio que mandó construir en su día Grace Kelly.

Este fin de semana tendrá lugar el segundo 'round' para la pareja. En esta ocasión la ceremonia será más opulenta y de carácter religioso. Tendrá lugar en Islas Borromeo, un exótico enclave junto al lago Maggiore propiedad de la acaudalada familia de la novia formado por tres islas y dos pequeños islotes. Según informa el diario italiano 'Varese News', la ceremonia tendrá lugar en el 'Isolino de San Giovanni', la más privada e inaccesible de todas, ya que está cubierta de mucha vegetación.

Después de celebrarse el enlace, la pareja hará la recepción de los invitados en Rocca d'Angera, donde se encuentra el imponente Castillo Borromeo, que aloja un museo y se encuentra cerrado al público por el enlace.

La novia vistió de Valentino en su ceremonia civil y se cambió hasta tres veces de vestido. Todos los ojos están puestos ahora en su siguiente armario casadero, del que se espera que sea aún más sorprendente y bello.