Pablo Alborán víctima de un terrible descuido: filtran su número de teléfono

Sin comerlo ni beberlo, ha tenido que hacer frente a un problemón por un despiste de la cantante Rosalía...

9 de febrero de 2018, 11:13

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Las redes sociales las carga el diablo. Tienes que estar con mil ojos puestos en todos los detalles y siempre se te escapa algo -si no, que se lo pregunten a la pobre Amaia-. Por muy acostumbrados que estemos, algo se te puede pasar. Es justo lo que le ha ocurrido a la cantante Rosalía. La pobre quiso compartir con todos sus seguidores el arte y el talentazo que tiene Pablo Alborán sin darse cuenta de que, a la vez, estaba desvelando algo clave en la vida del artista... Y, como no, se lió parda.

No es la primera vez que ocurre. Tampoco será la última. Cuando nos ponemos a compartir cosas en las redes sociales, es facilísimo que se nos cuele algo que no queríamos que viera la luz. El fondo de una foto, la declaración de alguien importante o, como es el caso, un número de teléfono. El cantante Pablo Alborán estaba tan tranquilo en su casa -o donde estuviese- cuando, de repente, su móvil se convirtió en un hervidero. Es una recreación de lo que imaginamos que ocurrió ayer por la tarde.

La cantante Rosalía, en un acto de buenísima voluntad, compartió una captura de pantalla en su perfil de instagram piropeando a su compañera de profesión. “No se puede ser más grande”, escribía junto a unos audios enviados por whatsapp. Pero, pero, pero, ¿qué está pasando? Rápidamente, miles de usuarios se dieron cuenta del fatal error de la cantante: ¡había compartido el número de teléfono de Alborán!

Cuando se dio cuenta del fatal error, borró la imagen pero, claro, ya había circulado demasiado tiempo. Rosalía no volvió a decir nada del error -imaginamos que estaba tratando de comunicarse con Alborán para disculparse- y el cantante desactivó el teléfono al poco tiempo. La avalancha de llamadas, mensajes y whatsapps que pudo recibir en esos minutos debió ser antológica. Pocos artistas hay tan populares y con tanto tirón como Alborán.

Ay, si es que las redes sociales las carga el diablo, ¡ya lo hemos dicho! Por suerte, nada más grave que cambiar de número y volver a exportar la agenda. Eso sí, Rosalía ya tiene una anécdota que contar a todos sus amigos. ¡Ánimo!

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