Nuria Roca (53 años) se encuentra en un gran momento tanto personal como laboral. En lo que se refiere a su vida privada, está feliz junto a su marido Juan del Val después de casi treinta años juntos y muy orgullosa de los tres hijos que tienen en común. En lo laboral, puede presumir de éxito en su programa de La Sexta ‘La Roca’ o en su faceta de colaboradora en ‘El Hormiguero’.
Además, Nuria Roca se ha convertido en una de las presentadoras de televisión más inspiradoras tanto con las apariciones que realiza a través de la pequeña pantalla, como con las que hace vía redes sociales. Porque a través de estas herramientas a las que ha sabido sacar partido, hace publicaciones con las que se acerca más si cabe a sus seguidores y se deja conocer mucho mejor.
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Sobre todo esto, Nuria Roca habla en las diferentes entrevistas que concede. Unas charlas en las que aborda con total naturalidad estos aspectos y también sobre otras cuestiones que marcan su día a día. Ahora, lo acaba de hacer en una conversación que ha tenido con ‘La Vanguardia’ y en la que ha hablado del paso del tiempo, de sus prioridades, de los cambios que han llegado a su vida una vez pasada la barrera de los 50…
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Nuria Roca habla de su filosofía de vida
Sobre ese paso del tiempo, Nuria Roca ha hecho una confesión sobre uno de los grandes aprendizajes que ha asumido en los últimos años. La presentadora ha asegurado que una vez que pasas la barrera de los 50, “eres consciente de que te queda menos, algo en lo que no habías reparado. Tratas de disfrutar más de las cosas, te desprendes de lo superfluo y de pensamientos absurdos, priorizas y rentabilizas el tiempo”.
La comunicadora también ha hablado sobre el tiempo vivido. Nuria Roca ha hablado de qué significa la felicidad para ella, una deducción a la que ha llegado tras todas esas vivencias que le han hecho ser quien es hoy en día. “Yo creo que la vida está constituida por momentos de felicidad. Nadie es feliz completamente… En un momento eres feliz porque estás disfrutando un maravilloso atardecer y al siguiente instante se te ha caído el café encima”, ha dicho sobre cómo para ella es importante disfrutar de los pequeños momentos.
Instagram @nuriarocagranell
Una reflexión a la que la colaboradora de ‘El Hormiguero’ ha sumado que “tienes que gozar de los momentos en que plenamente eres consciente de que estás contenta”. Y sobre esa diferencia entre estar feliz y estar contenta, ha dejado una frase de lo más significativa sobre cuál es la filosofía de vida que ella lleva a cabo. “Aunque está menos valorado, para mí es más importante estar contenta que feliz”, ha afirmado con rotundidad durante la entrevista que ha concedido a la citada publicación.
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Los cambios de Nuria Roca una vez pasados los 50
Un paso del tiempo sobre el que también ha hecho alusión a algunos cambios que ha sufrido a nivel físico. En las últimas entrevistas que ha concedido y también a través de sus redes sociales, Nuria Roca no ha tenido inconveniente en hacer gala de esa naturalidad que le caracteriza y hablar de cuestiones como la presbicia o sobre la menopausia.
Hace un par de semanas, Nuria Roca contó a través de Instagram que “después de tanto tiempo viendo el mundo a través de las gafas, por fin lo he visto todo claro”. Con esto, hacía referencia a que había pasado por quirófano para operarse de presbicia y así decir adiós a las gafas. “Y lo que viene ahora es otra historia: una sin cristales empañados, sin buscar gafas por casa, sin limitaciones”, comentó la presentadora de lo más contenta con la decisión tomada.
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También hace unas semanas habló abiertamente de la menopausia y de cómo la está viviendo ella. Fue en el podcast ‘A solas con…’ de Vicky Martín Berrocal donde se sinceró sobre este cambio que llegó a su vida hace unos meses. "Yo entré en los 50 muy contenta y ahora no lo estoy tanto… Este verano tuve de repente muchos calores y estoy batallando contra ella”, reveló sobre cómo está viviendo esta etapa.
@asolascon
Además, hizo referencia a uno de los cambios físicos que más ha notado en estos meses. “He tenido que comprar una talla más de sujetadores porque tengo los pechos como cuando estaba embarazada. El cuerpo cambia…”. Y también reconoció su punto débil. “Debería de tener una rutina de entrenamiento, pero soy un desastre”, dijo sobre cómo le falta establecerse esa rutina deportiva que sabe que tan bien viene tanto a nivel físico como mental.
Algo a lo que sumó que tampoco se alimenta tan bien como cree que debería hacerlo. Pero lo que está claro, es que todavía tiene tiempo por delante para seguir haciendo cambios que seguro que le aportan muchos de esos momentos de estar contenta que ella tanto valora.