Tanto los que habían trabajado con él, como sus compañeros de profesión, lo han llorado. Los hay que acudieron nada más enterarse de la noticia al tanatorio en el que reposaban sus restos, mientras que también los hubo que prefirieron rendirle un pequeño homenaje a través de las redes sociales.

Antonio Resines, actual presidente de la Academia de Cine, era uno de los primeros en llegar a despedirse de este maestro de la dirección. No tardarían en llegar otros compañeros como Imanol Uribe o el Gran Wyoming. Actrices como Aitana Sánchez Gijón o Loles León también acudían el martes a apoyar a la familia, que debía de estar destrozada tras el fallecimiento del cineasta.

En las redes sociales su recuerdo fue constante. Se recordaron sus películas, sus trabajos más sobresalientes y muchos de los que coincidieron con él destacaron aspectos personales, como Eduardo Noriega, que lo llamó, con todo el cariño del mundo, ‘cascarrabias entrañable’, mientras que Álex de la Iglesia lamentaba profundamente la marcha de este amigo, al que recordó por su maestría a la hora de manejar la cámara. “Qué bien rodaba. Técnico asombroso”, decía, con la admiración que sólo se le puede tener a los más grandes.