Se enamoraron perdidamente de su frescura y su belleza. Vivieron con ella la experiencia más plena de sus vidas, que fue convertirse en padres de Nicolás y Eros, respectivamente. Definitivamente, las personitas más especiales de sus vidas. Sin embargo, cuando el amor se acabó, Paulina Rubio se convirtió en la pesadilla de Nicolás Vallejo-Nágera y, ahora, Gerardo Bazúa. La última fotografía publicada por Colate en sus redes sociales muestra una preciosa estampa en donde abraza con fuerza y un amor inmenso al hijo que tuvo en común con la cantante mexicana. Acompañando a la foto, una frase crítica con la que señalaría lo difícil que se lo pone Pau para poder compartir momentos con su hijo: "Por fin juntos después de demasiado tiempo y no debería haber sido así". Y rematando el texto, el 'hashtag' "Basta". Desde 2015, no iban llegando informaciones de que la relación entre la estrella mexicana y el empresario no eran fluidas, y todo por la custodia de su vástago.
Pau puede ser la mujer más maravillosa y la enemiga más peligrosa. No solo parece estar comprobándolo Colate sino que, desde finales del año pasado, le estaría ocurriendo más de lo mismo a su última pareja, el cantante Gerardo Bazúa. Parecía que Eros, que aún no ha cumplido el año, iba a colmar de felicidad su relación, pero a finales de 2016 trascendió que la mexicana había echado de casa a 'Jerry'. Su última pareja, cantante como ella, estaría teniendo muchos problemas para ver al hijo que tienen en común. Fuentes cercanas a Bazúa aseguran que no le ha visto desde que ya no viven juntos y estaría pensando en demandarla y en luchar por la custodia del pequeño Eros. Gerardo, que puede que ya haya rehecho su vida, está tan dolido que dicen que el reciente tema que ha sacado al mercado, 'Ya no canto ni bailo contigo', estaría dedicada a Paulina. Además, en uno de sus tuits más recientes ha escrito "Despues de tanta mala vibra yo sigo creyendo que todo es bonito". ¿Iría este mensaje dirigido a su ex?
De momento, la única respuesta pública que les ha mandado Paulina ha sido desde sus redes sociales, donde no hay más que indiferencia, bailes con amigos y fotos que son pura felicidad desde la playa.