Paloma Lago (58 años) es uno de los rostros del momento por una razón nada agradable. La presentadora y modelo denunciaba al consejero gallego Alfonso Villares por supuesta agresión sexual hace apenas unos días, siendo algo que presuntamente ocurrió a finales del año pasado en su Ferrol natal. Al parecer, esta demanda ya ha sido admitida a trámite y Paloma incluso ya la habría ratificado ante el juez, siendo un delicado momento para ella, uno que estaría marcándola en profundidad.
El delicado momento de Paloma Lago
“Paloma está mal, tocada, porque este revuelo sólo hace que reviva el suceso. Una y otra vez. No es fácil", explica una fuente cercana a ella a ‘El Español’, medio que también asegura que Lago se encuentra su casa de Cabo Prior, en Ferrol, donde se habría refugiado en compañía de seres queridos y pilares importantes en su vida como su madre, Chus Gómez Deaño, su hijo Javier (28 años), y sus hermanos, Federico y Ana Pérez-Lago. De hecho, la mayor y “única preocupación de Paloma es su madre".
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El citado medio asegura que Paloma quiere hablar y contar todo, pero será algo que haga cuando sus abogados le den el visto bueno y haya pasado el juicio, estando centrada ahora mismo en que "primero que se haga justicia". Sin duda, esta decisión de denunciar a su supuesto agresor no ha sido fácil para ella, algo en lo que esta fuente quiso hacer hincapié: "Se pensó mucho el denunciar porque era consciente de que eso iba a salpicar el buen nombre de su familia. Su padre Quico ha sido alguien muy querido, una institución aquí en la zona", explican, dejando en evidencia que se trata de "la peor etapa de su vida, sin duda alguna", habiendo decidido refugiarse en ese entorno seguro y hablando sólo "con su abogado y su entorno más íntimo".
La denuncia de Paloma Lago
Al parecer, según ‘El País’, el presidente gallego, Alfonso Rueda, ha admitido ser conocedor desde el pasado mes de febrero de que su responsable de Mar, Alfonso Villares, había sido denunciado por un supuesto delito contra la libertad sexual de las mujeres, un caso que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia admitió a trámite, contando el demandado con el apoyo del ‘Partido Popular’.
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La secretaria general del PP gallego, Paula Prado, expresó recientemente su deseo de que pueda “demostrar cuanto antes su inocencia” y glorificaba el hecho de que Villares haya dimitido al salir esto a la luz: “Es un gesto que le honra”. En su discurso de dimisión en una rueda de prensa sin preguntas, Villares se ha declarado inocente y aseguraba querer “centrar todas sus fuerzas en defenderme en el ámbito judicial”, añadiendo que "dimitir para defenderme de una denuncia de la que soy totalmente inocente es una decisión difícil, pero estoy convencido de que es la correcta".
Sobre esto hablaba una de las amigas más cercanas a Paloma, Nuria Espasandín, en el programa ‘Y ahora Sonsoles’, donde aseguraba ser “muy amiga de Paloma, he estado hoy con ella, pero es que no tengo ninguna información al respecto que yo os pueda dar. Sé que ella está bien", añadiendo que había “desayunado con ella esta mañana y está bien. Ella es una persona súper espiritual y súper reservada para su vida".
El sobrino de Paloma que fue testigo
Hace unos días el programa ‘TardeAR’ desvelaba nuevos datos importantes sobre esto, habiendo podido hablar con un sobrino de Lago que, al parecer, estuvo cerca de lo ocurrido: “Yo estaba ahí ese día y por eso me han citado como testigo y tengo que ir a declarar al juzgado. Vivo pared con pared con ella. Yo le vi a él, pero no escuché nada, soy testigo circunstancial”, expresaba.
“Presencié algo pero no quiero decir el qué. Quiero dejarlo en manos de los abogados, el fiscal, el juez… Ya se sabrá, no quiero meterme en líos. Paloma quiere que sea discreto”, continuaba el joven, añadiendo que él conoce “a su tía, pero a él no. Respeto la presunción de inocencia. Esto tiene que dilucidarse en un juicio. No quiero que caiga sobre nadie la pena de telediario, así que quiero ser prudente y deseo que salga la verdad”.